El obradorismo condena la liberación del presunto narcotraficante Abraham Oseguera, “Don Rodo”, hermano de “El Mencho”, acusando al Poder Judicial. Sin embargo, con plena premeditación estratégica, los cuatroteístas en ningún momento señalan que los culpables de que esto haya ocurrido trabajan en la Fiscalía General de la República y en la Guardia Nacional. Las invectivas del Ejecutivo federal y de sus comparsas contra el PJ son de antología. Plan con maña, golpes bajos, acciones sucias. En este caso en concreto olvidan mencionar que órgano y fuerzas del orden no cumplieron con los requisitos mínimos para que un juez pueda sostener una aprehensión, juzgar y dictar sentencia.
La FGR adujo que Abraham Oseguera estaba en posesión de arsenal de alto calibre y drogas al momento de su captura. Pero, ¡lo que son las cosas!, resulta ser que familiares de “El Rodo” grabaron el operativo de detención y no, el mencionado individuo no llevaba consigo ni consignaba armas o drogas. La defensa del imputado pudo comprobar, entonces, que la Guardia Nacional había omitido múltiples “detalles” en su informe de la detención…
En resumidas cuentas: la carpeta de investigación que presentó la Fiscalía ante el Juez carecía de elementos suficientes y probatorios para sujetarlo a proceso. De hecho, el debido proceso del imputado se violó precisamente porque la defensa probó que la detención no sucedió como lo narraron los agentes que lo aprehendieron.
Hasta aquí lo que ya se conoce y se ha discutido ampliamente. Quiero agregar, ahora, otra cuestión: el operativo para poner al presunto criminal a disposición del juez fue un dardo envenenado del régimen cuatrotero contra jueces y estructura de la rama judicial del Estado. Una trampa más para culpar a un juez y a todo el aparato de justicia; criticarlo por dictar la liberación del imputado o denunciarlo por haber quebrantado la ley y sus derechos humanos de haberlo mantenido preso.
¿Qué se debe condenar? La falta de verdad, la mentira y falsedad con que actuaron tanto en la captura como en el proceso tratando de culpar al juez de un proceso desaseado por la propia Fiscalía.
¿Desde Presidencia instruyen a las fiscalías para que, cuando convenga, armen mal los expedientes y de esa forma tener excusas para pegarle al Poder Judicial? Ese parece ser el plan. De ese tamaño la hipocresía y la irresponsabilidad de los gobernantes del obradorismo.
Y, de hecho, no es que se pueda decir que los miembros de la Guardia Nacional o de la Fiscalía sean ignorantes, pues estos sí pudieron integrar una carpeta de investigación conforme a derecho para que un juez pudiera vincular a proceso a René Gavira en el caso Segalmex.
Pero vamos más allá: por lo visto, eso de liberar delincuentes solo puede ser realizado por la 4t. La Ley de Amnistía recién votada en el Congreso de la Unión, la cual fue enviada por López Obrador y a la cual los legisladores morenistas no le cambiaron ni una coma, permite que el presidente indulte a quien quiera, sin tener que dar una sola razón de su actuar…
Si la 4t piensa que con destruir la independencia y autonomía del Poder Judicial habrán ganado, se equivocan. El dinamitar a ese pilar del Estado, el primero y más importante de los tres, no abona a la pacificación del país, tampoco dejará margen para que Claudia Sheinbaum pudiera gobernar en caso de resultar vencedora en las elecciones venideras. Antes bien, tendrá también “politiquerías” y una mayor corrupción en la impartición de justicia, lo cual derivará en un incremento en la violencia. Lo que es más, ese aparato judicial a modo que los morenistas quieren erigir, en algún momento actuaría en contra de la señora presidenta para quitarla del poder.
La Barra Mexicana de Abogados, el Laboratorio de Impacto sobre el Estado de Derecho de la Universidad de Stanford y el Programa sobre Estado de Derecho del Diálogo Interamericano presentaron el informe “Una amenaza a la independencia judicial: Análisis de la iniciativa de las reformas constitucionales presentadas por el presidente López Obrador en febrero 2024″. Concluyen que las iniciativas de reforma de López Obrador son una amenaza directa al Poder Judicial, al andamiaje democrático, al balance de poderes y a la salud institucional del país. Contrarias a los estándares internacionales, socavan la democracia y sirven para erigir las bases de gobiernos dictatoriales.
Sí, la liberación del presunto delincuente Abraham Oseguera es reprobable. Qué lástima que eso es producto del actuar de morenistas y cuatroteístas, de un puñado de individuos tramposos, reprobados, irresponsables y odiadores. Todos ellos merecen ser condenados y castigados.
Giros de la Perinola
1.- Claudia Sheinbaum acusó a Santiago Taboada y a Xóchitl Gálvez de participar en la marcha del domingo 19, aduciendo que van a perder porque “el odio lleva a la derrota”. Uno debe tener cuidado cuando define las emociones de los otros; usualmente la descripción es el espejo de uno mismo.
2.- La burla y el desprecio son infinitos. Cecilia Flores, madre buscadora, lleva años rastreando el paradero de sus dos hijos. ¡Con sus sus manos ha localizado restos de más de dos mil personas! López Obrador no la ha querido atender. Pero eso sí, ahora que ella identificó lo que parece ser un crematorio ilegal en la Ciudad de México, toda la maquinaria oficial, empezando por el mismo López Obrador, se lanzaron sobre de ella.
A la víctima la volvieron a victimizar, diciendo que lo que ella halló son restos de perros, no de humanos. El régimen se refiere a ella como si Cecilia Flores fuera una persona que se deja manipular. López Obrador permitió que Martí Batres, el mismo que repartió para consumo a infantes la leche Betty, contaminada con heces, dijera que lo concerniente al mencionado crematorio es un “falso montaje”. Como si el dolor de la madre no fuese suficiente, este gobierno le quita a la señora también la dignidad de su búsqueda. ¡Malditos! Mil veces malditos.
4.- Martí Batres, el mismo que nunca pudo decir con qué ha estado contaminada el agua de la capital, en cuestión de horas, pudo “resolver” —con la comparsa de quien tiene como fiscal de la CDMX— lo que hay detrás de un crematorio clandestino.
5.- López Obrador es un criminal, por muchas razones. Su burla infinita ante los muertos y desaparecidos muestra su cínica monstruosidad. No volveré a hablar de él, más que para señalar sus crímenes. Él, quien se siente héroe, es un terrible criminal.
6.- Analizar muestras calcinadas requiere tiempo; ciertamente más de 24 horas para determinar el origen del ADN. se trata de humanos o de animales. Pero en la Ciudad de México, en menos de 12 horas determinaron que se trataba específicamente de perros. Eso ni los mejores laboratorios mundiales especializados en ello. Una mentira más.