Desde la colonia Anzures de la CDMX, surgen acusaciones dentro del Partido Revolucionario Institucional (PRI) sobre una supuesta campaña para influir en la estrategia electoral de Xóchitl Gálvez. Artículos de prensa y recortes recibidos en el ‘War Room’ del PRI destacan la “necesidad” de que Gálvez se distancie del PRI y del PAN, debido a la percepción negativa que estos partidos podrían estar generando en su candidatura.
Este enfoque fue resaltado por el periodista Jorge Ramos en un reciente artículo en el periódico Reforma, y posteriormente apoyado por un trascendido en El Universal. Los informes sugieren que Claudio X. González y Lorenzo Córdova están detrás de estas maniobras, buscando minimizar el rol de líderes partidistas como Marko Cortés y Alejandro Moreno Cárdenas.
Según fuentes cercanas a la campaña de Gálvez, la estrategia propuesta consistiría en promover a Gálvez como una candidata ciudadana más que partidista, intentando capitalizar su popularidad individual a pesar de las resistencias partidistas. Este planteamiento, sin embargo, es visto con escepticismo por algunos asesores, quienes recuerdan el caso de José Antonio Meade en 2018, quien intentó una estrategia similar sin éxito.
Un asesor de la campaña, mencionó que el PRI y el PAN contribuyen con el 80% del financiamiento de la campaña presidencial de Gálvez, lo que complica cualquier intento de distanciamiento. Además, subrayó la importancia de no repetir los errores de estrategias pasadas.
Claudio X. González, por su parte, mantiene en privado que la elección está prácticamente decidida en favor de Morena y proyecta su propia candidatura legislativa para 2027, contando con el apoyo de su padre, el empresario Claudio González Laporte. González también sostiene que es necesario que Gálvez incremente su presencia para evitar un control total del Congreso por Morena, aunque su propuesta parece contradecir la dinámica actual del sistema político mexicano.
Con información de La Política Online.