Las últimas imágenes obtenidas por dos sondas de la Agencia Espacial Europea (ESA), la Mars Express y la Trace Gas Orbiter, han revelado detalles sorprendentes de unas curiosas formaciones en Marte, ubicadas cerca del polo sur del planeta. Estas estructuras, conocidas popularmente como “arañas de Marte”, pero científicamente llamadas “araneiformes”, captan la atención por su peculiar forma que recuerda a un arácnido.
El nombre “araneiformes” proviene del latín y significa “con forma de araña”. Estas formaciones se desarrollan durante la primavera marciana cuando la luz solar incide sobre capas de dióxido de carbono (CO2) congelado en la superficie del planeta rojo. El calor del sol convierte el hielo de CO2 del fondo en gas, que se acumula y finalmente estalla a través de la capa de hielo superior.
Este fenómeno resulta en chorros de gas que expulsan polvo oscuro hacia arriba, rompiendo capas de hielo de hasta un metro de espesor. Al caer de nuevo, el polvo se asienta sobre la superficie marciana, formando las características manchas oscuras en forma de araña, que varían entre 45 metros y 1 kilómetro de ancho, visibles desde el espacio.
Además de las manchas oscuras, este proceso también crea patrones en forma de araña debajo del hielo, sirviendo como indicadores de la actividad subyacente. Estos araneiformes fueron observados por primera vez hace más de 20 años y su proceso de formación fue demostrado con precisión en 2021 por investigadores del Trinity College Dublin, quienes recrearon las condiciones marcianas en laboratorio.
La ESA ha indicado que estos araneiformes se localizan principalmente en las afueras de una región de Marte conocida como Ciudad Inca o, más formalmente, Angustus Labyrinthus. Inca City fue descubierta en 1972 por la sonda Mariner 9 de la NASA y continúa siendo objeto de estudio por su intrigante geografía y fenómenos como las “arañas de Marte”.