A pocos meses de concluir el actual sexenio, es casi imposible que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador logre restaurar completamente los recursos del Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios (FEIP) y del Fondo de Estabilización de Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF), cuyos saldos se han reducido significativamente desde 2018. Aunque se han aprobado reformas para incrementar las fuentes de financiamiento, expertos estiman que no se alcanzarán los niveles previos, faltando más de 308 mil millones de pesos.
Desde 2019, los fondos han sufrido reducciones sustanciales en sus balances. Al inicio de la administración de López Obrador, el FEIP contaba con 279 mil millones de pesos, cantidad que se ha visto mermada a 46 mil 635 millones en los primeros meses de 2024. Según expertos, se necesitarían más de 233 mil millones adicionales para alcanzar los niveles de 2018 en este fondo, un objetivo que califican de imposible. Por su parte, el FEIEF también ha visto una disminución drástica, desde los 88 mil millones en 2018 a tan solo 13 mil 541 millones en 2024.
En marzo, el Congreso aprobó una reforma para mejorar el financiamiento de estos fondos a través de nuevos mecanismos como activos financieros y excedentes, sin embargo, se considera que es tarde para revertir la situación actual. Gabriel Yorio, en comentarios recientes, sostuvo que esta reforma fortalecerá el FEIP a futuro, aunque para muchos expertos las medidas son insuficientes para el corto plazo. Emilio Sánchez Salazar, del CIEP, destacó que los fondos no cuentan actualmente con los recursos necesarios para enfrentar una nueva crisis, evidenciando un uso ineficiente y discrecional de estos en años anteriores.