Hoy abro la columna con la esperanza de que la inédita escena de civilidad que vimos ayer en la alcaldía Miguel Hidalgo se replique por todos lados.
En su recorrido, el morenista Miguel Torruco, aspirante a gobernar esa alcaldía de la CDMX, se acercó a saludar al actual alcalde del PAN, Mauricio Tabe, quien realizaba un acto proselitista en su carrera por lograr la reelección.
“Yo sí juego limpio”, alcanzó a decirle a Tabe el joven morenista, en medio del griterío de los asistentes al acto del panista a favor de su candidato. El alcalde reaccionó positivamente. Se acercó al oído izquierdo de Torruco para decirle: “Lo que tenemos que hacer es bajarle los ánimos a la gente, porque está muy prendida”.
Torruco asintió y se retiró del lugar, deseando éxito a su adversario. El gesto merece aplausos. Es una cachetada a la estrategia de polarización promovida desde Palacio Nacional para ganar la elección. Basta de buenos y malos, pobres y ricos, progres y fifís. Es también la aguja en este violento pajar en que se ha convertido el proceso electoral. Van 22 candidatos asesinados en lo que va del año y contando…
* El reverso de la moneda. Graco Ramírez, exgobernador de Morelos, tuvo que suspender la presentación de su libro Contra la represión autoritaria, memorias de la izquierda (Editorial Debate). Iba a ser presentado en el Museo de la Ciudad en Cuernavaca, Morelos. Al llegar se encontró el lugar lleno de patrullas y agentes judiciales que, asegura Ramírez, amenazaban con realizar un “acto de provocación” contra su persona. “Nos hemos enterado, además, que un grupo de choque, encabezado por Ulises Bravo—medio hermano de Cuauhtémoc Blanco— preparaba una acción de ésas que hizo en Coyoacán”, narró el exgobernador de Morelos en un video que subió a sus redes.
Graco consultó el tema con los integrantes del panel que lo iba a acompañar en la presentación del libro. Decidieron suspender la presentación. El panel está integrado por Enrique Serna, escritor; Lourdes Mendoza, periodista; Fernando Belaunzarán, activista y exdiputado federal; Carlos Lavin, cronista, y la conductora Gina Batista.
“Están cerrando espacios democráticos. Están impidiendo la libertad de expresión y están actuando como lo hicieron los grupos de choque que han provocado, incluso la muerte de varios actores políticos en nuestro estado”, dijo Graco.
En su libro, el exgobernador de Morelos desbarata la idea que la 4T representa a la izquierda mexicana. “Esta afirmación es evidentemente falsa. Morena es un partido liderado por un caudillo que encabeza y conduce una regresión autoritaria”, escribe Graco, en la contraportada.
* Seguimos con Morelos. La diputada federal del PRI Cynthia López Castro reprochó ayer a Morena no haber hecho candidata a gobernadora del bloque oficialista a Lucy Meza, hoy abanderada de la oposición, “por las amenazas que tenía del gobernador”.
“Morena (tampoco) dejó ser a mi querida Juanita Guerra, que es de ustedes, de Morena, candidata en Morelos, por las amenazas del gobernador y del crimen organizado”, dijo, durante su intervención en la sesión de ayer.
El Congreso de Morelos, por cierto, obligó a Cuauhtémoc Blanco a pedir licencia al cargo para contender por una diputación federal. Quería ser candidato a gobernador. Ya está de licencia. El “dedo mayor” de Morena lo premió con una curul, a pesar de la foto en la que el exfutbolista aparece con prominentes criminales y la violencia que azota a ese estado.
* El miércoles leí un interesante artículo de Emiliano Polo, que publicó en Global Americans bajo el título de La destrucción de la política exterior de México. El autor sostiene que las recurrentes ignominias y desatinos de la diplomacia mexicana no son resultado de una estrategia incompetente o de un error, sino más bien de una serie de rabietas (de YSQ) “sin rumbo ni propósito”.
Ayer nos enteramos que la embajadora de México en Ecuador, Raquel Serur Smeke, fue declarada persona non grata, luego de las declaraciones de López Obrador sobre las elecciones en ese país, celebradas en 2023. El Presidente de plano se pasó por el arco del triunfo el principio de no intervención en los asuntos de otros países, consagrado por la Doctrina Estrada. En una de sus mañaneras, sugirió que el actual presidente de Ecuador, Daniel Noboa, se benefició del asesinato de su rival Villavicencio.
Dijo textual: “De manera muy extraña hubo elecciones en Ecuador. Iba la candidata de las fuerzas progresistas (Luisa González) como diez puntos arriba… Entonces un candidato habla mal de la candidata que va arriba y de repente es asesinado. La candidata que iba arriba (afín al correísmo) se cae y el candidato que iba en segundo sube”.
Hay que recordar que Perú también declaró persona non grata al mismísimo López Obrador, luego de que apoyara las intenciones del expresidente Pedro Castillo, hoy preso, de disolver el Congreso e instaurar la autocracia. Lejos están los tiempos en que México era respetado en el mundo por su impecable política exterior.