Las estadísticas ya encendieron los focos amarillos. Hay temores fundados de que las elecciones del 2 de junio se conviertan en las más violentas de la historia del país. En los dos meses y 22 días que lleva 2024 ha habido asesinatos, secuestros, desapariciones, balaceras, amenazas de muerte por lo menos en 14 estados del país.
Los homicidios relacionados con la política (alcaldes, funcionarios, candidatos) sumaban ya 33 a finales de febrero, según la organización Data Cívica. La consultora Integralia, que dirige Luis Carlos Ugalde, cifra en 21 los asesinatos de aspirantes a algún cargo de elección popular, hasta ayer. El índice de homicidios refleja el grado de intervención del crimen organizado en el proceso electoral. Quiere poner aspirantes a modo. El INE informó ayer que suman 83 las solicitudes de candidatos que piden protección de las autoridades. De ese total, 74 ya la tienen, entre ellos cuatro candidatos a gobernador. Otros 46 de plano ya se bajaron de la campaña por amenazas, según El Universal (20/3/24).
La violencia electoral, por lo demás, trasciende colores y partidos. Morena y el PAN son los más golpeados. Pero MC, el PVEM, el PRD y PT ya tienen sus víctimas.
* El Presidente y destacados morenistas insisten en negar la realidad. Los otros datos dicen que vivimos en un país pacífico, donde el pueblo es “feliz, feliz, feliz”. Los morenistas se apegan al guion de “no le muevan ni una coma”.
El tema lo llevamos a la rueda de prensa que ofreció ayer Ana Lilia Rivera, presidenta de la Mesa Directiva del Senado. Le dijimos que la preocupación número uno de los mexicanos es la inseguridad y que las estadísticas perfilaban las elecciones más violentas que hayamos tenido. Respondió: “Difiero de su opinión. De manera generalizada en México no hay violencia. Hay zonas que, seguramente el gobierno tiene ubicadas, donde hay que cuidar que la violencia vaya disminuyendo”.
Y volteó al pasado: “Sabemos que heredamos un país en el que el abandono hacia los sectores más vulnerables, los jóvenes, el empleo, los salarios, las oportunidades, la educación, la salud, se convirtió en negocio y dejó de ser un derecho. Eso lo hemos heredado. Sin embargo, yo considero que México va a tener una elección, la más grande de su historia, de manera pacífica”.
— ¿Dice usted que en México no hay violencia…?
— Le digo que la violencia no es generalizada… es que eso de “la más violenta de la historia” se me hace tan dramático. No es verdad, atajó.
— ¿Le parece poco que, según las estadísticas, hayan matado a 21 aspirantes en lo que va de 2024?, ¿le parece normal que 83 candidatos estén solicitando protección?, ¿que 24 candidatos se hayan bajado de la campaña por miedo?
— Eso no es nuevo. Lo vivimos en otros sexenios, desde Calderón la violencia tomó estos perfiles y ha sido parte de esa herencia que tuvimos que enfrentar, respondió.
La consultora Etellekt dice que en los comicios de 2021 al menos 35 aspirantes fueron asesinados, mientras que en 2018, el número de víctimas alcanzó las 48. La violencia electoral, por lo demás, trasciende colores y partidos. Los más “golpedos” son Morena y el PAN. Pero MC, PRD, PT y PVEM también suman aspirantes asesinados.
Luis Carlos Ugalde, exconsejero presidente del IFE, distingue dos tipos de violencia electoral. Una, que es mediáticamente atractiva, son las ejecuciones de candidatos. “Pero el fenómeno más grave es el sometimiento silencioso de cientos de candidatos a cargos locales, sobre todo municipales, que ya ha ocurrido. Son candidatos que han pedido permiso y que reciben apoyos de grupos delincuenciales”, advierte.
* Mario Zamora, senador del PRI, fue candidato a gobernador de Sinaloa en las elecciones de 2021. En carne propia vivió las presiones del crimen organizado, incluido el secuestro de sus colaboradores. Lo buscamos ayer para que opinara sobre la violencia política. Antes de pronunciarse, abrió su celular, buscó una foto, y dijo: “Déjame enseñarte algo, cómo amanecimos en mi estado hoy…”.
Mostró una imagen tomada por la mañana en Badiraguato: dos cabezas en el suelo y un letrero: “Así le va a pasar a toda la bola de vergas que le busquen al Guano: GDG”.
Así es el país pacífico del que habla el presidente López Obrador.
* Ya que estamos. El senador del PRD, Miguel Mancera, presentó ayer una iniciativa para combatir la coacción de voto en las próximas elecciones. Lo que busca el exjefe de Gobierno capitalino es que se prohíba llevar celulares a la hora de votar y sacar una fotografía de la boleta ya cruzada.
“Es necesario combatir la coacción del voto, por la solicitud de terceras personas, a la ciudadanía al momento de ejercer el sufragio”, dijo el perredista.
La propuesta busca evitar que se intimide a la ciudadanía con la amenaza de votar por algún partido o candidato”, puntualizó.