Desde hace algunos días Adán Augusto López Hernández ha comenzado a deslizar que ya acordó con Andrés Manuel López Obrador para ser el próximo titular de la bancada de Morena en el Senado. Cuando sus interlocutores le mencionan si tiene el visto bueno de Claudia Sheinbaum, el exgobernador replica que con el acuerdo presidencial basta. “Los primeros dos años de Claudia va a seguir mandando Andrés”, soltó.
La salvedad es obligatoria porque Adán Augusto no terminó bien con Claudia en el periodo de precampañas y porque además Sheinbaum tendría muy avanzado que su coordinador en la Cámara Alta sea Marcelo Ebrard, tal como ya informó LPO.
El exgobernador de Tabasco acordó en todas las líneas con el candidato Javier May lo cual en Palacio dejó buen sabor de boca porque en esa campaña pesa Andy López Beltrán.
Adán Augusto está convencido de su futuro protagonismo y a través de su hermana Rosalinda, que también será senadora, ya arman un grupo compacto de futuros senadores de la 4T.
Cree además que Alejandro Moreno Cárdenas será el actor principal del elenco opositor y asegura tener buena comunicación con el campechano para negociar en la arena legislativa.
El ex jefe de Segob entiende que la relación bilateral con Estados Unidos va a ser muy compleja en el próximo sexenio y de ahí menciona que Ebrard debería ser el embajador en Washington. Una lectura muy conveniente para su plan. Cuando le dicen que para esa representación suena Luisa María Alcalde replica, no sin cierta sorna, que su sucesora también iría gustosa a la embajada en Montevideo.