Todo un mensaje el que desde la Suprema Corte de Justicia de la Nación mandaron al presidente López Obrador y a Morena al haber designado como al ministro Alberto Pérez Dayán como el representante del Poder Judicial Federal al acto oficial para conmemorar el 107 Aniversario de la Promulgación de la Constitución.
El ministro Pérez Dayán se convirtió la semana pasada en el enemigo público número uno de la administración obradorista y de los legisladores de Morena luego de que con su voto de calidad como presidente de la Segunda Sala de la Corte se declaró inconstitucional la reforma eléctrica del presidente López Obrador.
La presencia de Pérez Dayán hoy en el acto celebrado en Querétaro, en el que el presidente López Obrador no estuvo presente, es visto por algunos como un espaldarazo al ministro frente a la amenaza de los morenistas de llevarlo a juicio político por emitir su voto de calidad y tirar otra reforma presidencial.
Nos hacen ver que la designación de Pérez Dayán para representar al Poder Judicial tiene un fuerte mensaje político.
Curiosamente, en su mensaje el ministro dijo que el Poder Judicial debe estar alejado de la política “y no arrojarlo al fondo de ella para que no resulte un juego de las pasiones”.
Temen más emboscadas a Xóchitl Gálvez en EU
Tras la emboscada que le tendieron a Xóchitl Gálvez en Nueva York, nos dicen que el equipo de la candidata opositora teme que se preparen otras protestas en contra de ella. Hoy y mañana, doña Xóchitl tendrá diversas reuniones en Washington para terminar su gira por Estados Unidos. Aseguran que tienen informes de que algunos de los morenistas que el viernes fueron burlados por Gálvez con un señuelo que le permitió salir por la puerta de atrás luego de su reunión con representantes de la comunidad mexicana, buscan cobrarle esa afrenta y tratar de opacar su visita a la capital estadounidense. Nos hacen ver que si así de bajo está el nivel de la competencia en territorio extranjero, la rudeza de la campaña en el territorio nacional será de pronóstico reservado.
Hoy, el presidente López Obrador presentará al menos 16 reformas constitucionales. Nos dicen que en la bancada oficial en la Cámara de Diputados hay la línea de darle toda la celeridad a los proyectos presidenciales para que sean votados lo antes posible. Sin embargo, nos hacen ver que en periodos pasados en el Senado de la República las iniciativas presidenciales no corrieron la misma suerte, pues encontraron freno dentro de la misma bancada de Morena. Nos dicen que ahora que Ricardo Monreal regresó como líder del rebaño morenista, deberá demostrarle a Palacio Nacional su capacidad para hacer que las iniciativas sean votadas. Lo que sí no podrá hacer don Ricardo, nos dicen, son milagros, pues la oposición ha dicho que no irá con varias de las reformas presidenciales.
Y a propósito de las reformas presidenciales que llegarán al Senado, nos dicen que quien ya se prepara para participar en el debate de éstas, es la senadora panista y jefa de la oficina de Xóchitl Gálvez, Kenia López Rabadán. Nos dicen que la senadora defenderá la posición de doña Xóchitl y del frente opositor, quienes consideran que la mayor parte de las iniciativas presidenciales solo tienen propósito de crear una narrativa desde Palacio Nacional con fines electorales, aseguran que lo que se intenta es crear la imagen de que la oposición se opone a que los ciudadanos reciban mayores beneficios, como 100 por ciento de sus pensiones, por lo que consideran que el papel de la oposición es hacer ver que algunas de las propuestas del Presidente son peligrosas para las finanzas públicas y otras para la democracia. El reto, nos dicen, será que en la percepción de los ciudadanos la oposición no quede como el villano de la película que frenó las iniciativas del Presidente, que le prometían más dinero a la gente: un buen reto.
En torno a la negativa que han recibido algunos paisanos para realizar el trámite de la credencial para votar desde el extranjero mostrando sólo el pasaporte, nos explican en el INE que deben presentar tres documentos: uno para acreditar la nacionalidad, una identificación con fotografía y un comprobante de domicilio. En este sentido, nos señalan, el pasaporte mexicano sí es un documento válido que sirve para acreditar el requisito de identificación con fotografía, sin embargo, no sustituye al acta de nacimiento que exige explícitamente la ley. Nos hacen ver que, para solicitar la credencial para votar, el ciudadano debe forzosamente acreditarse con su acta de nacimiento, una identificación con fotografía -que podría ser el pasaporte- y el comprobante de domicilio.