El presidente López Obrador está muy enojado con Tim Golden, dos veces Premio Pulitzer, excorresponsal del NYT en México; y con ProPublica, agencia de noticias independiente con sede en Nueva York.
El reconocido periodista publicó en esa agencia de noticias una investigación sobre el presunto financiamiento de dos millones de dólares del narco a la campaña presidencial de AMLO, en el 2006.
La ira llevó al Presidente a calificar a Golden de “gran calumniador” y a ProPublica, de ser instrumento de la DEA.
El tema lo rebasó. El hashtag #Narcopresidente ha tenido 170 millones de vistas. Datos que el propio AMLO dio en la mañanera señalan que la mitad de esas vistas se dieron en Argentina, en Colombia, y hasta en Holanda.
“No dudo que estén metidos los del bloque conservador de México, Claudio X. González y otros más, pero esto tiene una connotación más allá de los grupos opositores del país”, dijo.
–¿Un complot internacional? –le preguntaron.
–Sí, es una conspiración, es un acto de subversión, pero no hacen nada, no pasa nada, porque el pueblo de México es mucha pieza.
* AMLO se levantó ayer con la noticia de que ProPublica había respondido a la andanada de ataques que ha lanzado al periodista y a la agencia.
En esa réplica, ProPublica escribió: “El Presidente ha atacado en forma agresiva al reportero Tim Golden, llamándolo ‘mercenario de la DEA’ y ‘un peón’ del Departamento de Estado”.
La agencia recordó que el pasado miércoles, AMLO retó a Golden a que fuera a la mañanera a contestar preguntas sobre los orígenes del reportaje y las identidades de sus fuentes en Mexico y en Estados Unidos. ProPublica aseguró que, “aunque lo disfrutaría”, Golden no va a atender la invitación.
Lo de revelar las identidades de las fuentes es una petición absurda. El reportero está obligado a protegerlas cuando así se acuerda. En el argot se le llama off the record (fuera de grabadora) Eso lo sabe hasta un estudiante de periodismo.
El anonimato, además, es indispensable para que la fuente se decida a hablar. Qué no se le olvide a López Obrador que el escándalo de Watergate, que obligó a dimitir al entonces presidente de Estados Unidos, Richard Nixon, fue destapado por los periodistas Carl Bernstein y Bob Woodward, con base en información que les pasó Garganta profunda (Deep throat).
* No se entiende por qué, si está tan ofendido, no presenta una denuncia penal en los tribunales de Estados Unidos. Ayer se lo preguntaron en la mañanera. “No, no, no. Es mejor el debate abierto, porque esto ayuda más a que se transparente”, respondió.
AMLO ha preguntado una y otra vez a Tim Golden: ¿dónde están tus pruebas? Sabe que no hay pruebas materiales. Es obvio que una operación de financiamiento ilegal no deja huella. No hay documentos ni firmas que la acrediten.
¿Se imagina a un narco exigiendo que le firmen un pagaré para compensarle los supuestos dos millones de dólares? Yo no. La única forma de aproximarse a la verdad es vía los testigos protegidos, aunque esa figura también es cuestionable. A cambio de una reducción de la pena, son capaces de decir cualquier cosa.
Al presidente le preguntaron si Tim Golden solicitó hablar con él antes de la publicación de la historia. Lo negó. ProPublica, sin embargo, dice lo contrario. “Contactamos con el vocero del Presidente (Jesús Ramírez) más de una semana antes de la publicación y le proporcionamos un resumen detallado de las conclusiones del reportaje. El vocero prometió una respuesta, pero nunca la recibimos”.
Añadió: “nuestro reportaje, que se basó en entrevistas con funcionarios actuales y la revisión de documentos oficiales, reveló la existencia de una investigación previamente secreta de la DEA sobre las supuestas donaciones a la primera campaña presidencial de López Obrador en 2006 por narcotraficantes del llamado Cártel de Sinaloa. “La táctica de atacar a los reporteros que revelan verdades incómodas es tan vieja como la democracia misma. Pero el auge de los medios sociales ha incrementado el poder de los ataques a los periodistas”.
“…Esta experiencia puede ser difícil para los reporteros estadunidenses, pero en México, donde se mata con impunidad a los periodistas que investigan el crimen organizado y la corrupción oficial, es un asunto de vida o muerte”.
* El Consejo Estatal de Morena en Zacatecas denunció “posibles vicios de la vieja política” en el proceso interno que culminó con la “designación” de Soledad Luévano, quien ya ocupa un escaño, como primera fórmula del guinda en la entidad para el Senado.
En un comunicado señaló: “El Consejo Estatal de Morena Zacatecas no reconoce la designación de la primera fórmula para el Senado de la República. No estamos convencidos de que la encuesta haya arrojado dichos resultados, mucho menos nos sentimos representados”.
Las consejeras y consejeros de Morena en el estado le piden a la dirigencia nacional, que encabeza Mario Delgado, no traicione la confianza de su militancia.