Como un juego de tahúres, donde uno engaña al otro, así nos dicen que se ve el bluff entre el PRI y el presidente López Obrador para acabar pronto, en torno a la propuesta presidencial de que las pensiones de los trabajadores sean de 100% de sus sueldos a la hora del retiro.
Nos dicen que el otrora partidazo le compró la provocación a AMLO, y no sólo eso, sino que apostó al doble. Ofreció acompañar la propuesta, siempre y cuando haya recursos para implementarla. Un “pago por ver”, nos dicen.
Hoy el presidente parece recoger sus fichas. Dijo en su conferencia mañanera que saluda el acompañamiento, pero que le sorprendía lo que llamó “desesperación” dentro de la oposición.
“Me dio mucho gusto ayer que los del PRI y hasta los del PAN, fíjense a qué nivel de desesperación o lo que hace la temporada electoral, ellos reformaron la Constitución para quitarle derechos a los trabajadores en cuanto a sus pensiones, primero Zedillo y luego Calderón”.
¿Será que el Presidente quería ganar el juego sin tener las cartas en la mano?
Con la bendición de Sheinbaum y AMLO, Monreal regresa al mando
Nos cuentan que en la plenaria de senadores de Morena regresaron las caras largas y el evidente malestar de José Antonio Álvarez Lima, del grupo de los radicales y quien por segundo año, aspiraba a la coordinación de la bancada, y de nuevo perdió. Todo salió como estaba planeado, y nuevamente se impuso Ricardo Monreal, quien además contó con la bendición de la candidata presidencial Claudia Sheinbaum y de Palacio Nacional, vía la secretaría de Gobernación, Luisa María Alcalde. Don José Antonio, nos relatan, se arrinconó en la reunión plenaria, e incluso salió antes de que concluyera. En contraste, don Ricardo nunca perdió la sonrisa de oreja a oreja. La obediencia tiene su recompensa.
Tal y como adelantamos ayer, Luis Espinosa Cházaro renunció a la coordinación de los diputados del PRD y en su lugar llegó Francisco Huacus, y mientras el nuevo coordinador aseguró que el sol azteca no se está desmoronando y que hay unidad y fuerza, le renunciaron Marcelino Castaneda y Laura Fernández, con lo que perdió una quinta parte de su disminuida fuerza, que ahora pasó de 15 a 12 legisladores. Pero, además, nos dicen que la epidemia de renuncias en el PRD no acaba, pues nos adelantan que se vienen más dimisiones, entre ellas, la de Edna Díaz.
No dicen que el dirigente nacional del Partido del Trabajo (PT), Alberto Anaya, no irá por un escaño para el Senado de la República, pero sí buscará reelegirse como diputado federal. Sin embargo, don Alberto, tal y como se lo adelantamos en este espacio hace unos días, está negociando para que los integrantes de su partido tengan más espacios en el equipo de la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum, además del que ocupa Gerardo Fernández Noroña, actualmente coordinador de organizaciones sociales y civiles. Nos recuerdan que en el PT hay varios soldados caídos en la repartición de candidaturas, tanto federales como locales, por la prioridad que se les está dando a los verdes y a los morenistas. Es claro que hay aliados de primera y de segunda.
Hasta ayer por la tarde, nos cuentan, 14 reporteros, camarógrafos, fotógrafos, que cubren las actividades del presidente Andrés Manuel López Obrador, habían presentado una denuncia ante el Instituto Nacional de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, por la “filtración” y difusión ilegal de sus datos sensibles que fueron expuestos desde el pasado 22 de enero, pero que Presidencia de la República detectó hasta el 26 de enero, cuando ya era todo un escándalo por la difusión de la información personal de los comunicadores. ¿Alguien hará algo para proteger a las víctimas de la filtración?