La presencia del cantante mexicano de corridos tumbados Peso Pluma en el Festival de Viña del Mar en Chile ha desatado controversia.
Desde octubre pasado la cuenta oficial en X (Twitter) del festival chileno confirmó la presencia del intérprete de “Ella baila sola” y “Lady Gaga”.
“Desde las raíces más profundas hasta los sonidos más modernos, Peso Pluma te hará sentir la verdadera esencia de la música mexicana! Uno de los artistas mas escuchados llega a Viña”, anunció en un tuit.
Hace apenas una semana, otra publicación en redes promovió la participación del cantante en el cierre del festival.
“Hassan Emilio Kabande Laija es el joven mexicano que ha llevado los corridos a posicionarse como uno de los géneros favoritos de las nuevas generaciones. La mezcla de trap y ritmos urbanos lo ha convertido en un ícono mundial que suma y suma miles de reproducciones en las plataformas digitales”, dice el Festival en su invitación para adquirir los boletos.
Sin embargo, en días recientes han surgido voces que demandan que se reconsidere la presentación del artista jalisciense, cuyas letras han sido señaladas de constituir una apología al narcotráfico.
Una de las más destacadas posturas es la de René Lues Escobar, concejal de la Municipalidad de Viña del Mar, quien dirigió una carta a la alcaldesa Macarena Ripamonti Serrano, en la que le exige cancelar el contrato de Peso Pluma.
En la carta, que hizo pública en el portal Biobiochile, el concejal Lues retoma los comentarios expuestos en una columna en ese mismo sitio del sociólogo Alberto Mayol, académico de la Universidad de Santiago.
“No lo olvide, el 1 de marzo, en las pantallas del canal del Estado, escucharemos la voz del narco. Será para que nos acostumbremos, supongo. Pero claro, nadie se quiere meter contra Peso Pluma porque es famoso, porque sacarlo del festival puede ser contrario a la lógica electoral, porque se puede perder el voto joven”, dice Mayol en su artículo.
Además de llamar a Peso Pluma “un promotor de la cultura narco”, el profesor cuestiona cuánto pagó Chile por su actuación.
“No es que el artista haga narraciones objetivas de la vida cotidiana mexicana, contando entre otras historias alguna historia narco. No es eso. En las canciones se elogia épicamente la vida narco, se refiere a los lujos que procura el narco, se alude a relaciones sexuales basadas en el dinero que el narco permite, se señalan los vehículos que se usan, se habla de la producción de cocaína, de su consumo y del fentanilo. Asociándolo todo a una vida espectacular, de diversión constante, de armas, de alta velocidad, de grandes camionetas, de fronteras cruzadas fuera de la ley y de adrenalina por montones”, argumenta Mayol, quien criticó que hasta antes de la publicación de su texto ningún concejal se hubiera pronunciado al respecto.
El caso de Lucero
En su carta a la alcaldesa, el concejal Lues solicitó a los canales de televisión concesionarios del Festival de la Canción de Viña del Mar, a través de la alcaldesa y la comisión de promoción del festival, revisar la mantención del contrato con el artista Peso Pluma en su participación en el show de la última noche del Festival.
“Esto tiene precedentes, pues en el 2014 se canceló la participación de la cantante Lucero como jurado y artista del festival, después de causar un escándalo por la publicación de unas fotografías en las que aparece en una cacería de animales”, expuso el concejal.
“Entiendo que esta decisión tiene costos, pero es mejor tomarla ahora, y no arrepentirnos luego por no haber hecho todo lo posible para impedir que la narcocultura se enseñoree en nuestros espacios, pues, más temprano que tarde, generará un inmenso daño a nuestro país”, concluye Lues Escobar.
La misma exigencia hizo en una conferencia en la que recordó el caso de Lucero.