El Presidente llegó más de una hora tarde a uno de los actos más importantes en el tramo final de su sexenio. Su arribó generó alivio entre los asistentes, porque durante varios minutos corrió con insistencia la versión de que había tenido una parada forzosa en el Hospital Joya de Cancún, a minutos de haber aterrizado.
LPO contactó diversas fuentes del gobierno para verificar esta información. En estricto off the record, varios aseguraron que en efecto el Presidente fue revisado por un equipo médico para descartar cualquier complicación cardíaca. Se sabe que el Presidente sufre de problemas en el corazón -entre otras dolencias- desde hace años.
“Hoy se sintió mal y lo tuvieron que revisar. Por eso llegó tarde a la inauguración en Tulum”, reconocieron a LPO fuentes al tanto de los eventos.
En enero de 2022, López Obrador ya sufrió una descompensación que intentó ser negada por el vocero presidencial, Jesús Ramírez, lo que causó un cuestionamiento muy duro de parte de Adán Augusto López Hernández. El vocero dijo que había visitado el Hospital Militar solamente por un chequeo de rutina.
En ese momento, sería el propio AMLO quien desde la mañanera confirmaría, horas más tarde, que en efecto habría sido intervenido con un stent para evitar un problema mayor.
Más tarde, Latinus revelaría que AMLO ya había sido trasladado en un avión militar de urgencia desde Palenque porque se había descompensado. Esta emergencia ocurrió 15 días antes de la intervención. “Los datos son ciertos, yo estoy enfermo, tengo varios padecimientos. Tengo todos los males que se mencionan ahí. Todo lo que se dice ahí es cierto”.
Y agregó: “Lo de la ambulancia que fue a Palenque fue porque había riesgo de un infarto y me llevaron al hospital donde me recomendaron un cateterismo, pero en eso me dio Covid, así que tuvimos que esperar”, narró el tabasqueño.
En abril de 2023, López Obrador también sufrió una descompensación en Mérida, Yucatán. Sufrió un desmayo repentino. “Como que me quedé dormido, fue un váguido”, dijo unos días más tarde. Otra vez los trolls de la vocería habían intentado desmentir el suceso.
LPO había revelado meses atrás que AMLO ya no viajaría más en vuelos comerciales. Los motivos eran centralmente dos. Por un lado, el Presidente quería evitar los abucheos que ya estaba sufriendo con mayor frecuencia en los vuelos, y que sistemáticamente se viralizaban en las redes sociales.
Pero también su esposa, Beatriz Gutiérrez, le había solicitado que acepte viajar en los aviones de la Sedena para poder tener un mayor control en caso de nuevas descompensaciones. “Hoy se sintió mal y lo tuvieron que revisar. Por eso llegó tarde a la inauguración en Tulum”, reconocen fuentes al tanto de los eventos.
Según estas versiones, la revisión se habría realizado en el Hospital Joya de Cancún, después de aterrizar en la Riviera Maya.
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