Nos comentan que en el sector salud en general están muy preocupados por la llegada a México de la variante Pirola de Covid 19, misma que podría ser preponderante en esta temporada de invierno de enero y febrero. Pero nos comentan que más preocupa la poca atención que otra vez el gobierno federal parece tener de este tema. Nos comentan que hay que temor que el gobierno federal sólo se conforme con aplicar las vacunas Abdala, de Cuba, y Sputnik, de Rusia, y ya no compre biológicos de generación actualizada de Estados Unidos, como Pfizer y Moderna, con el argumento de que esos ya están a disposición del mercado privado, aunque a un costo que no todo mundo puede acceder. Si bien, la Organización Mundial de la Salud (OMS) levantó ya desde hace un tiempo la emergencia mundial por la enfermedad, a algunos funcionarios públicos del sector salud les preocupa que tampoco se haya puesto en marcha una campaña masiva sobre la necesidad de la vacunación, y mucho menos, de medidas como usar cubrebocas o cierto distanciamiento.
Todavía no había iniciado la reunión de alto nivel con la delegación estadounidense para abordar el tema migratorio, y mientras una caravana de miles de migrantes centroamericanos cruzaban el país, el presidente Andrés Manuel López Obrador rompió el hielo presumiendo las obras estrella de su administración: el Tren Maya, Tren Interoceánico y la puesta en operaciones de Mexicana de Aviación. El mandatario aprovechó el comentario del secretario de Estado Antony Blinken que justificó que la delegación que encabeza llegó retrasada porque “los vientos no estuvieron en su favor”. Ante esa ventana de oportunidad López Obrador bromeó que, aquí, sus adversarios dicen que sus trenes y aviones no llegan a tiempo, pero “es como la justicia que a veces tarda, pero llega”.
El magistrado Reyes Rodríguez Mondragón cumplió con su última sesión como presidente del Tribunal Electoral con bajo perfil, luego de que tres de sus pares exigieron su renuncia que será efectiva a partir del 1 de enero. El aún presidente no emitió ningún mensaje por el término de su periodo, y previo a la sesión llegó acompañado de la magistrada Janine Otálora, su única aliada durante el más reciente “golpe de Estado” en el órgano electoral. Al final de la sesión, como un último gesto de reconocimiento, algunos colaboradores le aplaudieron al magistrado al hacer mutis del pleno, que la próxima vez tendrá como presidenta a Mónica Soto.
Nos recuerdan que en el Instituto Nacional Electoral corre el tiempo para los nombramientos pendientes, en los que parece no hay avance en las negociaciones. Pese a que estos días no sesionará el Consejo General, nos hacen ver que lo deseable sería que se esté trabajando en propuestas sólidas para estos cargos, que tendrán que ser aprobados a mediados de enero. Lo anterior, luego de que no se logró consenso para la Secretaría Ejecutiva. Nos comentan que el tiempo apremia, pues además urge que se definan los perfiles para varias áreas que han trabajado con encargados de despacho en los últimos meses, y que son vitales para la organización del inminente proceso electoral.