Ovidio Guzmán López, hijo del conocido narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, se ha declarado inocente de los cinco cargos que se le imputan, durante su audiencia inicial en una corte de Chicago. Guzmán López ha negado ser responsable de delitos relacionados con narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas de fuego. Esta declaración se produce después de su extradición exprés el pasado viernes, en medio de las celebraciones de independencia de México.
El joven narcotraficante, de 33 años, es señalado por las autoridades estadounidenses de ser uno de los principales responsables de la crisis de opioides en el país, debido al tráfico de fentanilo. Además, se le acusa de conspirar para distribuir drogas, formar parte de una empresa criminal, exportar narcóticos desde México a Estados Unidos, realizar transacciones financieras con dinero obtenido de manera ilícita y portar armas de fuego de forma ilegal.
La audiencia, que tuvo una duración de poco más de 15 minutos, mostró a un Ovidio Guzmán vestido con el uniforme naranja típico de los reclusos, esposado y usando anteojos. Durante la sesión, el acusado mencionó que toma medicamentos para la depresión y la ansiedad, y que recientemente fue sometido a una cirugía estomacal. Su defensa está a cargo del abogado Jeffrey Lichtman, quien también representó a su padre, “El Chapo”, en su juicio en Estados Unidos.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, comentó sobre la extradición, mencionando que se llevó a cabo bajo un convenio de colaboración entre México y Estados Unidos. La próxima audiencia para Ovidio Guzmán ha sido programada para noviembre.