Pablo Hiriart, en su columna publicada en SonoraPresente, aborda la posible candidatura de Mario Delgado a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Según Hiriart, esta candidatura podría ser una “inesperada bendición” para el Frente Amplio opositor en la capital del país, dada la percepción de inconsistencia política que rodea a Delgado.
El presidente de Morena ha sido objeto de críticas, incluso dentro de su propio partido. Porfirio Muñoz Ledo lo describió como un “glúteo, porque no tiene hueso”, mientras que Marcelo Ebrard, quien lo encumbró en Morena y en la administración pública, ha tenido tensiones con Delgado, especialmente después de que este último desestimara los planteamientos de equidad que pedía Ebrard.
Hiriart señala que Delgado ha actuado con sevicia contra Ebrard, cerrándole la puerta en las narices y humillándolo, en un acto que califica como traición. Esta traición, según el columnista, es la única carta de Delgado para obtener la candidatura a la jefatura de Gobierno de la CDMX.
Finalmente, Hiriart sugiere que si la agenda para ganar la capital se centra en la seguridad pública, la mejor opción de Morena sería Omar García Harfuch. Si la agenda es social, Clara Brugada sería la candidata ideal. Sin embargo, la traición a Ebrard parece ser el único mérito de Delgado en esta contienda.