Hugo López Gatell, encargado de la respuesta de México ante la pandemia de COVID-19, ha tomado decisiones que han normalizado y acentuado la inequidad en el acceso a los servicios de salud. Se prevé que México tendrá vacunas diferenciadas: unas para la población con menos recursos y otras para aquellos con mayor capacidad económica.
López Gatell ha politizado el tema de las vacunas, sugiriendo que hay personas que desean vacunas extranjeras por “razones de aversión ideológica”. A pesar de sus afirmaciones, las vacunas Abdalá (cubana) y Sputnik (rusa) no cuentan con la autorización de la Organización Mundial de la Salud. Estas vacunas no han demostrado ser tan eficaces como otras aprobadas por organismos internacionales.
Además, farmacéuticas como Astra Zeneca y Pfizer han esperado meses para obtener la aprobación definitiva de COFEPRIS. Con la reciente aprobación del presidente López Obrador para que las vacunas sean distribuidas por el sector privado, se espera que López Gatell tome decisiones más rápidas en este aspecto.
En resumen, la gestión de la pandemia por parte de López Gatell ha generado controversias y desigualdades en el acceso a vacunas y tratamientos. La población mexicana enfrentará un invierno con diferencias marcadas en el acceso a vacunas actualizadas y eficaces.