En las instituciones militares de México, la violencia física y humillaciones forman parte del panorama cotidiano que enfrentan cadetes y soldados. Así lo evidencian videos y fotografías a los que Latinus tuvo acceso, grabados por los propios militares, que muestran prácticas de tortura física y psicológica arraigadas en las escuelas militares del país.
Uno de los videos muestra a elementos siendo forzados a sostener su peso corporal con la cabeza en una posición denominada “mortero”, una postura extremadamente dolorosa que, en ocasiones, culmina con el desmayo de quien la realiza. Durante esta tortura, los cadetes y soldados son golpeados con tablas o tubos, principalmente en la zona de los glúteos. Otra práctica común es “el vampiro”, donde los soldados son colgados cabeza abajo por horas, dificultándoles la respiración al esparcir talco en sus rostros.
Estos abusos no forman parte del entrenamiento oficial en la formación militar, pero ocurren con regularidad. En ocasiones, estas prácticas son vistas como pruebas de valor, mientras que en otras son castigos por faltas cometidas o simplemente novatadas tradicionales en las escuelas castrenses.
El colectivo Guacamaya ha revelado, a través de correos electrónicos hackeados, diversos casos de abusos en planteles de la Secretaría de la Defensa Nacional. En 2021, al menos ocho causas penales relacionadas con abusos de autoridad hacia elementos de la institución fueron abiertas en el fuero militar. Estos incidentes incluyen golpizas y prácticas que ponen en peligro la vida e integridad de los soldados, alejadas del programa oficial de formación militar.