El fiscal Uriel Carmona ha sido detenido este viernes en la ciudad de Cuernavaca, Morelos, en un fuerte operativo de la Fiscalía de la Ciudad de México, la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Marina (Semar). Los cargos contra el fiscal, que se ha entregado voluntariamente, están relacionados con la obstrucción de la justicia en el caso de Ariadna Fernanda, la joven que fue asesinada en Ciudad de México en octubre del año pasado y cuyo cadáver se encontró en la autopista de Cuernavaca.
Uriel Carmona, en entrevista con EL PAÍS, denuncia que desde la mañana de este viernes más de 120 agentes ministeriales, policías y marinos estaban rodeando su casa. “Están a punto de tumbar mi puerta y yo estoy solo con mi familia y mis hijos chiquitos. Temo por mi integridad y por la vida de mis hijos”, ha declarado minutos antes de ser detenido. “Estoy muy sorprendido de lo que está pasando porque están violando el fuero constitucional que me protege, están aplastando el Estado de Derecho”, ha señalado. El fiscal ha salido de su casa y ha sido trasladado en un vehículo blindado de la policía estatal hasta un campo de fútbol cercano donde le esperaba un helicóptero para ser trasladado por aire hasta la Fiscalía de la capital. En todo momento el dispositivo ha sido vigilado por policías y militares fuertemente armados.
Carmona señala directamente al gobernador del Estado, Cuauhtémoc Blanco, de ser el responsable de su detención en un capítulo más de la guerra abierta que existe entre ambos. La fiscalía que dirige, investiga al gobernador desde hace años por vínculos con líderes del crimen organizado en Morelos. “Cuauhtémoc Blanco le ha solicitado al presidente de la República deshacerse de mí, quitarme de la Fiscalía, porque él piensa que vamos a proceder en su contra, porque el Ministerio Público a mi cargo tiene más de diez carpetas en contra del gobernador por delitos graves”, señala.
El fiscal Carmona fue designado en 2018 por el antiguo gobernador, Graco Ramírez, del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y ratificado cuando la Fiscalía se convirtió en un órgano autónomo. Los choques políticos con Blanco no han cesado desde que este llegó al poder en 2019, de la mano de Morena y el partido Encuentro Social.
La Fiscalía de Ciudad de México, la cual ha girado la orden de aprehensión contra el fiscal, ha señalado en una rueda de prensa que Carmona pasará este viernes a disposición del juez por su “probable participación en delitos contra la procuración y administración de justicia”, que tienen que ver entre otros temas con el retardo en la investigación de Ariadna Fernanda López.
El fiscal declaró que la joven había muerto por una broncoaspiración debido a una intoxicación etílica y no por las lesiones que se habían detectado en el cuerpo. A partir de entonces, comenzó una disputa entre las fiscalía Morelos y la de Ciudad de México por resolver el caso. Mientras Morelos asegura la anterior versión, la fiscal Ernestina Godoy aseguraba que se trató de un feminicidio y atrajo el caso para que fuera resuelto en la capital. Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno en ese momento, acusó al fiscal Carmona de manipular y encubrir el caso y declaró que debía existir una sanción para quien “dolosamente” había ocultado la verdad. La aspirante a ser candidata de Morena en las próximas elecciones de 2024 ha hecho referencia al caso en varias ocasiones para hablar del derecho de las mujeres a la justicia. “Nunca más que alguien que se dedica a la procuración de justicia esconda un feminicidio”, ha señalado Sheinbaum después de la detención del fiscal.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó hace una semana que el fiscal no podía ser procesado por ningún delito porque cuenta con fuero constitucional, la inmunidad de la que gozan los servidores públicos en México. Ante la ausencia de Carmona, un fiscal interino deberá tomar el puesto, mientras el Congreso del Estado decide si remueve de su cargo al actual fiscal y nombra a un nuevo titular.
