A qué está jugando el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, se preguntan varios priistas que hasta hace algunos días veían que la cúpula del partido realizaba todos los esfuerzos para que su candidata, Beatriz Paredes, ganará la votación.
“Alito”, nos dicen, sabía desde hace días que en las encuestas, tanto privadas como las propias, Xóchitl Gálvez salía arriba de Paredes, sin embargo Paredes podría ganar la elección convocada por el Frente Amplio por México, lo que daría como resultado un empate, una ganando la encuesta, y otra, ganando la elección.
Sin embargo, ayer “Alito” de manera sorpresiva salió a decir que Xóchitl Gálvez iba arriba en las encuestas y a sugerir que Paredes podría bajarse de la contienda antes de llegar a la elección del Frente.
La decisión del líder priista, nos dicen, tiene varias lecturas. La primera, que recibió presión por parte del PAN y el PRD para no seguir impulsando a Paredes, y que, de hacerlo, estaría poniendo en riesgo la unidad del Frente Amplio por México.
La otra, nos dicen, es que Morena habría buscado una negociación con “Alito” para que el Frente no culminara su proceso de elección y que se cumpliera el escenario vaticinado por el presidente López Obrador de que estaba decidido desde un inicio que Xóchitl Gálvez sería la candidata, y que el proceso fue solo una puesta en escena, una farsa.
El premio, para el líder priista, aseguran que fue propuesto por el coordinador de los diputados de Morena, Ignacio Mier, y consiste en que se dará vía libre para que “Alito” y su bancada presidan la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados y la Junta de Coordinación Política.
Todo el paquete de San Lázaro.¿A qué estará jugando “Alito”?