LOS PEORES CAMBIOS de gobierno son los que, paradójicamente, se dan entre partidos afines. La historia política del México de los últimos 30 años así lo demuestra.
Cuando Vicente Fox entregó la administración a Felipe Calderón, la entonces jefa de la Oficina de la Presidencia, Patricia Flores, reunió a los funcionarios foxistas y los corrió. No quedó ninguno en el nuevo gabinete.
Lo mismo sucedió con Ernesto Zedillo y Carlos Salinas: barrió las escaleras de arriba a abajo, pese a la advertencia de que el país se iría a la quiebra si no mantenía a Pedro Aspe en la Secretaría de Hacienda.
Zedillo metió a la cárcel a Raúl Salinas, pero la transición con Fox fue tersa gracias a José Ángel Gurría y Luis Ernesto Derbez. La segunda posición más importante, Hacienda, fue para un priista, Francisco Gil.
Misma situación se presentó entre Calderón y Enrique Peña Nieto: se perdió la línea que separaba PAN del PRI: ejemplos, Agustín Carstens, José Antonio Meade, Enrique de la Madrid y Javier Lozano.
Históricamente la izquierda se fractura desde adentro y en la carrera en pos de retener la Presidencia esa máxima no va a ser la excepción. Se equivocan quienes creen que la transición estará exenta de rompimientos.
A tres semanas del inicio oficial de las campañas de las corcholatas de Morena, se da una guerra fratricida entre Marcelo Ebrard Casaubon, Claudia Sheinbaum Pardo y Adán Augusto López Hernández. Ebrard critica el proceso de selección, denuncia chicanadas y manda señales de rompimiento si no hay piso parejo, reeditando 1994, cuando Manuel Camacho perdió la candidatura ante Luis Donaldo Colosio.
Sheinbaum podrá ganar la encuesta y erigirse como candidata, pero todavía “correrá mucha agua de aquí hasta junio” y si Xóchitl Gálvez como aspirante por la oposición la eclipsa, puede haber un golpe de timón.
A partir del 5 de septiembre Adán Augusto deberá saltar a una posición que le asegure visibilidad política y presencia nacional. El gobierno no, porque le anularía sus aspiraciones presidenciales. Morena tiene que tener claro que las guerras fratricidas aniquilan. Ya lo estamos viendo.
EL GRUPO DURO atrás de Claudia Sheinbaum empieza a contrapuntearse con la facción de los más moderados de la 4T que, hasta hace unos días, preferirían a uno más afín a ellos en la Presidencia. Justo ahí el inevitable rompimiento con el ala radical y el desplazamiento natural de los grupos de influencia en ese pase letal de estafeta de Morena a Morena. En el primer bando, como cabeza de grupo, el vocero Jesús Ramírez, y con él, la señora Beatriz Gutiérrez Müller, Epigmenio Ibarra, Pedro Miguel, Pablo Gómez, Citlalli Hernández, Paco Ignacio Taibo, El Fisgón Rafael Barajas, Román Meyer y Luisa María Alcalde, entre otros. En el segundo bando, Rogelio Ramírez de la O, Víctor Villalobos, Jorge Nuño, Alfonso Romo, Miguel Torruco, y por supuesto Marcelo Ebrard y Adán Augusto López.
JOSÉ ÁNGEL GURRÍA tiene de aquí al 3 de septiembre para entregarle a quien resulte el candidato o la candidata del Frente Opositor su Plan de Gobierno. El tamaulipeco va echar mano de lo que ya está disponible en términos de diagnósticos y soluciones que en los últimos años han elaborado think-tanks, tipo México Evalúa, el IMCO, CIDE, Ethos o el CEEY. Gurría elaborará una matriz de temas y buscará el acompañamiento de expertos. Ejemplo: Juan Carlos Romero Hicks, especialista en temas de Educación, o Ildefonso Guajardo, en Economía, el primero también retirado de la contienda y el segundo en suspenso aún. Tampoco descarta invitar a personajes como el ex secretario de Hacienda de Andrés Manuel López Obrador, Carlos Urzúa. El objetivo es elaborar un plan que pueda ser adoptado por el candidato como plataforma de gobierno.
Y MIENTRAS UNOS se bajan, otros continúan subiéndose a la contienda por la candidatura de la Alianza Opositora. Hoy tocaría el turno a Francisco Javier García Cabeza de Vaca. Lo curioso es que se registraría remotamente, a través de Zoom, desde algún lugar de Estados Unidos. El panista no puede venir a la CDMX porque podría ser aprehendido. El ex gobernador de Tamaulipas se está inscribiendo de última hora, tras de que Lilly Téllez abandonara la carrera. La sonorense era la apuesta fuerte de ese grupo, en el que los operadores políticos son Roberto Gil Zuarth y Guadalupe Acosta Naranjo. ¿Qué camino tomarán éstos y los suyos ante la imposibilidad que tiene Francisco Javier de llegar, y el cada vez mayor empoderamiento de Xóchitl Gálvez?
LOS DINEROS SERÁN cruciales en la elección del candidato de la Alianza Opositora y no se diga para la campaña presidencial. Alejandro Moreno va querer llevar mano en ambos procesos. Así que no pierda de vista al que es su principal operador financiero. Se trata de Manuel Herrejón Suárez, quien casualmente después de haber sido nombrado Secretario de Vinculación Empresarial y Emprendimiento del PRI Nacional, se volvió socio de Masari Casa de Bolsa, la intermediaria que preside Fredi Farca Charabati, multisancionada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, que preside Jesús de la Fuente. Allegados al PRI han revelado que Herrejón es el cerebro detrás de esquemas de lavado de dinero del que hoy se acusa a Alito.
MANUEL VELASCO BUSCARÁ la reelección de senador por el PVEM o una diputación para, de ahí, saltar a una posición de gabinete si Claudia Sheinbaum gana las elecciones presidenciales del 2024. El “Güero” es apreciado por Andrés Manuel López Obrador por la cercanía que tuvo con su abuelo, Fernando Coello Pedrero. Se ha convertido en el interlocutor real de los verdes ante la 4T, quien tiene derecho de picaporte y acceso directo a Palacio Nacional, cosa contraria de Jorge Emilio González, defenestrado en el entorno del tabasqueño. Habrá que ver si la fuerza de Velasco le alcanza para ganar Chiapas. Si el Verde va solo, le restará votos a los guindas, sobre todo si el Presidente se aferra a mandar a Zoé Robledo, quien aparece abajo en las preferencias electorales.
NORMA PIÑA DEJÓ plantados esta semana a los diputados cuatroteístas que vía Ignacio Mier la invitaron a los conversatorios sobre la Reforma al Poder Judicial. La Presidenta de la Suprema Corte les dijo por escrito que el resto de los ministros “no habían autorizado su asistencia”, lo que llamó la atención del Congreso y sobre todo de Morena, pues la cabeza de la Corte nunca ha pedido permiso a sus pares para ir a eventos protocolarios. Piña a cambio pidió también por escrito a los diputados que invitaran en lo individual al resto de sus compañeros. ¿Por qué no va la Presidenta, pero solicita la presencia de los demás ministros? El desaire de Piña va a ser muy costoso porque ahora la oposición se irá con todo contra los más de 21 mil millones de pesos que la Corte tiene en sus fideicomisos.
EN EL PAN se empieza a ver un cisma. Y es que las dirigencias panistas en varios estados ya habían pactado con Santiago Creel apoyarle en la candidatura presidencial de 2024. Tenían el beneplácito del presidente del partido, Marko Cortés. Pero las bases militantes en las entidades se han venido rebelando en los últimos días, dando el apoyo a Xóchitl Gálvez. Ven a la senadora hidalguense como alguien disruptiva y que está energizando la carrera presidencial. Creel, hasta el día de su registro, estaba confiado en tener los votos de la militancia, aproximadamente 200 mil, pero con una desbandada en curso la línea dura de la cúpula blanquiazul parece que ya no le puede garantizar nada.