Mientras que las encuestas y mediciones rumbo a 2024 registran que Morena y sus corcholatas mantienen la delantera en las preferencias electorales, la oposición se ha enfrascado en los últimos días en episodios de pleitos y guerra de declaraciones, en las que resaltan las ocurrencias para elegir candidato, los desencuentros y las insinuaciones de autodestapes de dirigentes.
Previo a la elección para renovar gubernaturas en el Estado de México y Coahuila, el próximo 4 de junio, han surgido en la oposición diferendos que de acuerdo con analistas políticos, exdirigentes de partidos y promotores de una candidatura opositora de unidad, sólo limpian el campo a Morena y a sus aspirantes.
Otros analistas consideran que estos conflictos en la oposición son normales, pero reconocen que podrían aumentar en la medida que carece de un método a estas alturas para promover las ideas de los participantes y que sean electos por un método democrático con el apoyo ciudadano.
Esta semana, MC y el PRI se acusaron de todo, luego de que el partido naranja impulsó la campaña en bardas Con el PRI ni a la esquina, lo que causó molestia en el tricolor pero también en los otros partidos de Va pro México: PAN y PRD.
Otro conflicto lo protagonizan Lilly Téllez y Santiago Creel, aspirantes presidenciales por el blanquiazul. La senadora acusa al diputado de no ganar ningún cargo de elección popular como ella sí lo ha hecho, lo que éste rechaza. También lo responzabiliza de estar atrás de la propuesta de juntar un millón de firmas para ser candidato, lo que él niega.
Sobre la propuesta lanzada por el dirigente Marko Cortés de poner como requisito a los aspirantes un millón de firmas, ha recibido las críticas no sólo de aspirantes panistas, sino priistas y perredistas, pues alertan que ello podría ocasionar la compra de apoyos.
Analistas políticos y exdirigentes partidistas señalaron que mientras los partidos de oposición se entretienen en pleitos internos, autodestapes de líderes y requisitos incumplibles para los abanderados externos, no hay ni siquiera un método para elegir a su candidato presidencial, por lo que el oficialismo y sus corcholatas aprovechan la “cancha libre” que les dio el INE para hacer campaña.
El analista político Alberto Aziz Nassif consideró que estos pleitos internos y la falta de definición de la oposición que ni siquiera tiene método para elegir al candidato presidencial, significa una desventaja muy fuerte frente a las corcholatas.
Expuso que la oposición está “tratando se inventar requisitos de último momento, como exigir un millón de firmas, en lugar de haber optado por mecanismos institucionales y democráticos como elecciones primarias”.
Gabriel Guerra, analista político, dijo que es increíble que a unos meses de que inicie el proceso electoral 2024, la alianza Va por México no tome decisiones, no tenga el método para elegir candidato a la Presidencia y que continúen los pleitos con MC y los autodestapes como el de Alejandro Moreno.
Indicó que mientras Morena y sus corcholatas tienen meses haciendo campaña, promocionando y marcando los tiempos de la sucesión presidencial, la alianza Va por México lleva cinco años analizando los métodos, las estrategias y aún ni siquiera tiene claro cómo elegirá al candidato.
Luis Carlos Ugalde, politólogo y expresidente del IFE, consideró que “no hay pleitos, simplemente no han iniciado el procedimiento. Lo que veo son opiniones porque ni siquiera hay una convocatoria. Lo que hay es una espera para ver qué va a pasar en el Estado de México”.
Dijo que las corcholatas si bien tienen ventaja, tienen un jefe indiscutible que pone las reglas como pasaba con el PRI, pero claramente hay diferencias y se están pegando por debajo de la mesa.
Damián Zepeda, exlíder nacional del PAN, dijo que no se debe perder el tiempo y entrar en descalificaciones, sino abrir el proceso interno, una serie de debates, una gira nacional de varios meses, para que los aspirantes expongan sus propuestas, sus ideas y con ello consolidar una candidatura ante la ciudadanía.
“Vayamos por la candidatura más competitiva. Pedir un millón de firmas es ridículo en lugar de mostrar sus ideas a la sociedad, por lo que debe haber un método abierto, transparente”, indicó.
El también expresidente nacional panista, Gustavo Madero, lamentó que la oposición esté enfrascada en pugnas internas, mientras que el oficialismo se encuentra muy adelantado en sus procesos internos y ahora incluso la actual dirigencia blanquiazul considera el requisito de un millón de firmas para ser candidato.
“Veo a una oposición muy desorganizada, sin claridad sobre cuál será el método y los tiempos para elegir a un candidato, con pleitos que benefician más a Morena y al Presidente”, subrayó.
El analista Leonardo Curzio opinó que la oposición no ha lanzado una estrategia para posicionar a sus aspirantes a la candidatura presidencial, porque están esperando los resultados de la elección en el Estado de México para trabajar a partir de ello.
Añadió que PAN, PRI y PRD están fuera de la discusión nacional y pierden tiempo para cerrar la brecha entre Va Por México y Morena y sus aliados: “Están esperando también si hay o no división en Morena”.
La periodista Beatriz Pagés, promotora de una candidatura de unidad, consideró que la oposición no ha entrado a la competencia y sólo los aspirantes de Morena están en los reflectores, lo que se refleja en las encuestas.
“Los partidos están en la consolidación de una mesa de diálogo para definir cuál debe ser el método y tendrá que servir para ponerse de acuerdo en otras cosas, como en la necesidad de ir en una coalición electoral y de gobierno”, expuso.
José Antonio Crespo, analista político, detalló que los precandidatos de Morena tienen mayor exposición en las encuestas porque llevan un año y medio promocionando su imagen, frente a un vacío en la oposición.
Pero consideró que la situación cambiará: “Si la oposición se pone de acuerdo, si sacan un candidato de consenso, sobre todo, si está legitimado por un apartado de participación ciudadana, podrían competir”, expuso.
Guadalupe Acosta Naranjo, presidente del Frente Cívico Nacional, dijo que los pleitos entre MC y el PRI, y las diferencias entre Téllez y Creel, no generarán fisuras en la alianza opositora, pues son normales en los procesos de selección de candidatos.
“Esto es consustancial a los procesos de selección de candidaturas. No deberíamos preocuparnos, es normal que cuando comienza un proceso de selección, quienes aspiran tengan puntos de vista distintos”, dijo.