En Hermosillo hay al menos mil 453 casas abandonadas que representan un riesgo para la población debido a su estado de abandono. Esta situación es un problema que afecta la salud pública, la seguridad, el medio ambiente, así como un foco de delincuencia y vandalismo.
El Sol de Hermosillo hizo un recorrido por varias colonias del Sur, Centro y Norte de la ciudad y constató que el problema de las casas abandonadas sigue presente. Los vecinos solicitan a las autoridades municipales que tomen medidas para abordar este problema, ya que estas viviendas abandonadas se han convertido en un lugar de acumulación de basura y desechos que representan un alto riesgo de incendio.
Los vecinos que viven cerca de las casas abandonadas se quejan de los problemas que generan, como la acumulación de basura, el riesgo de incendio, el vandalismo y la presencia de indigentes que se meten a realizar sus necesidades. En algunos casos, los vecinos también señalan que las casas abandonadas representan un riesgo estructural debido a su deterioro.
Sin embargo, en algunos casos, la rehabilitación de estas casas abandonadas no es fácil. Por ejemplo, en el sector Centro, algunas de las casas abandonadas están hechas de adobe y con el paso del tiempo se han deteriorado de manera considerable. Además, algunas de estas casas son consideradas patrimonio histórico, lo que significa que se requiere un permiso especial del Instituto Nacional de Antropología e Historia para remodelarlas.
