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Caso Her­nán­dez Alco­cer: Un ope­ra­dor sinies­tro en los corre­do­res de la jus­ti­cia

julio 13, 2022
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Caso Her­nán­dez Alco­cer: Un ope­ra­dor sinies­tro en los corre­do­res de la jus­ti­cia
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Durante más de 20 años Jesús Her­nán­dez Alco­cer operó liti­gios y nego­cios ganán­dose fama de ser un abo­gado que, por las bue­nas o por las malas, con­se­guía lo que que­ría. La pre­sen­cia de Her­nán­dez Alco­cer en cual­quier lugar era noto­ria debido a su ves­ti­menta: tiran­tes, cor­bata y pañuelo coor­di­na­dos. Así se le cono­ció en las altas esfe­ras del poder en las que se codeó con jue­ces, magis­tra­dos, minis­tros, polí­ti­cos, jerar­cas de la Igle­sia cató­lica y empre­sa­rios.

Sus atuen­dos, según quie­nes lo cono­cie­ron, incluían una pis­tola de oro incrus­tada con bri­llan­tes. Su gusto por las muje­res jóve­nes y her­mo­sas tam­poco pasaba inad­ver­tido.

El res­tau­rante Sun­tory de la colo­nia Del Valle, en el sur de la ciu­dad de México, fue el lugar que le sir­vió como ofi­cina para rea­li­zar “tra­tos” en

los que, de entrada, ponía el arma sobre la mesa para adver­tir que su misión era solu­cio­nar a toda costa un con­flicto.

los que, de entrada, ponía el arma sobre la mesa para adver­tir que su misión era solu­cio­nar a toda costa un con­flicto.

Aun­que es cono­cido por estar vin­cu­lado con diver­sos asun­tos que se ven­ti­lan en juz­ga­dos de la Ciu­dad de México, donde ejer­ció su influen­cia, su nom­bre no apa­rece en los regis­tros judi­cia­les.

Fraude pro­ce­sal

De acuerdo con el Regis­tro Nacio­nal de Pro­fe­sio­nis­tas, Her­nán­dez Alco­cer tiene dos cédu­las pro­fe­sio­na­les. Una, expe­dida en 1974 con el número 0304950, lo acre­dita como licen­ciado en cien­cias polí­ti­cas egre­sado de la UNAM. La otra fue emi­tida ape­nas en 2017, con el número 10700616, que lo acre­dita como licen­ciado en dere­cho egre­sado de la Uni­ver­si­dad del Dis­trito Fede­ral.

Donde sí apa­rece su nom­bre es en el ofi­cio número SIEDF/0374/2012 emi­tido por la Sub­pro­cu­ra­du­ría de Inves­ti­ga­ción Espe­cia­li­zada en Deli­tos Fede­ra­les de la extinta Pro­cu­ra­du­ría Gene­ral de la Repú­blica de fecha 18 de abril de 2012.

El docu­mento se refiere al caso por el que Her­nán­dez Alco­cer era cono­cido antes de su deten­ción: el fraude millo­na­rio por el que el ahora falle­cido obispo Oné­simo Cepeda fue denun­ciado.

Her­nán­dez Alco­cer apa­rece como pro­ba­ble res­pon­sa­ble junto con el obispo y per­so­na­li­da­des como el enton­ces minis­tro Ser­gio Armando Valls Her­nán­dez, tam­bién ya falle­cido, los magis­tra­dos fede­ra­les Manuel Barai­bar Cons­tan­tino y José Pablo Villalba; el magis­trado elec­to­ral José Ale­jan­dro Luna Ramos; el abo­gado espe­cia­li­zado en pro­pie­dad inte­lec­tual, Ale­jan­dro Luna Fan­diño, y el empre­sa­rio Jaime Matute Labra­dor.

Her­nán­dez Alco­cer apa­rece como pro­ba­ble res­pon­sa­ble junto con el obispo y per­so­na­li­da­des como el enton­ces minis­tro Ser­gio Armando Valls Her­nán­dez, tam­bién ya falle­cido, los magis­tra­dos fede­ra­les Manuel Barai­bar Cons­tan­tino y José Pablo Villalba; el magis­trado elec­to­ral José Ale­jan­dro Luna Ramos; el abo­gado espe­cia­li­zado en pro­pie­dad inte­lec­tual, Ale­jan­dro Luna Fan­diño, y el empre­sa­rio Jaime Matute Labra­dor.

Todos fue­ron denun­cia­dos por Art­hi­nia Inter­na­cio­nal, S.A., por fraude pro­ce­sal de 130 millo­nes de dóla­res que supues­ta­mente intentó cobrar Oné­simo Cepeda mediante un pagaré, por la misma can­ti­dad, fir­mado el 28 de abril de 2003 por Olga Azcá­rraga, expre­si­denta del Con­sejo Direc­tivo de la empresa.

En la denun­cia, la empresa indicó que Azcá­rraga nunca reci­bió el dinero y que en rea­li­dad Cepeda, quien era con­fe­sor de la mujer, y su ase­sor Jaime Matute le pidie­ron fir­mar un papel en blanco que pos­te­rior­mente hicie­ron pasar por el pagaré con el que pre­ten­dían que­darse con los acti­vos de Art­hi­nia que cons­ta­ban de 24 pin­tu­ras, entre las que se encon­tra­ban obras de Rufino Tamayo, Modi­gliani, Diego Rivera, José Cle­mente Orozco, Pablo Picasso, Frida Khalo, Leo­nora Carring­ton, Fran­cisco Goi­tia, Oskar Kokosha, Marc Cha­gall y Goya.

En la denun­cia, la empresa indicó que Azcá­rraga nunca reci­bió el dinero y que en rea­li­dad Cepeda, quien era con­fe­sor de la mujer, y su ase­sor Jaime Matute le pidie­ron fir­mar un papel en blanco que pos­te­rior­mente hicie­ron pasar por el pagaré con el que pre­ten­dían que­darse con los acti­vos de Art­hi­nia que cons­ta­ban de 24 pin­tu­ras, entre las que se encon­tra­ban obras de Rufino Tamayo, Modi­gliani, Diego Rivera, José Cle­mente Orozco, Pablo Picasso, Frida Khalo, Leo­nora Carring­ton, Fran­cisco Goi­tia, Oskar Kokosha, Marc Cha­gall y Goya.

Her­nán­dez Alco­cer fue seña­lado como uno de los abo­ga­dos que ope­raba a favor de Oné­simo Cepeda, quien falle­ció en enero pasado.

“En com­pa­ñía del abo­gado Ale­jan­dro Luna Fan­diño, se aper­sonó otro sujeto cono­cido como ‘abo­gado’ –sin serlo– de nom­bre Jesús Her­nán­dez Alco­cer, quien den­tro del liti­gio uti­liza a diver­sos abo­ga­dos; sin embargo, acude a los liti­gios, pero es cono­cido por tener una gran ‘auda­cia’ para lograr sus ile­ga­les come­ti­dos, tan es así que pre­su­mi­ble­mente cuenta con diver­sas inda­ga­to­rias por dicho delito y el de usur­pa­ción de pro­fe­sión, ade­más del delito de extor­sión”, señaló la com­pa­ñía en su denun­cia.

“En com­pa­ñía del abo­gado Ale­jan­dro Luna Fan­diño, se aper­sonó otro sujeto cono­cido como ‘abo­gado’ –sin serlo– de nom­bre Jesús Her­nán­dez Alco­cer, quien den­tro del liti­gio uti­liza a diver­sos abo­ga­dos; sin embargo, acude a los liti­gios, pero es cono­cido por tener una gran ‘auda­cia’ para lograr sus ile­ga­les come­ti­dos, tan es así que pre­su­mi­ble­mente cuenta con diver­sas inda­ga­to­rias por dicho delito y el de usur­pa­ción de pro­fe­sión, ade­más del delito de extor­sión”, señaló la com­pa­ñía en su denun­cia.

Sin embargo, en el ofi­cio antes men­cio­nado, el enton­ces titu­lar de la SEIDF, Irving Barrios Mojica, auto­rizó el no ejer­ci­cio de la acción penal con­tra los coa­cu­sa­dos.

Su falta de cre­den­cia­les para ejer­cer como abo­gado, al menos hasta 2017, la ates­ti­gua una per­sona que lo enfrentó en un pro­ceso judi­cial cons­ta­tado por Pro­ceso: “Abo­gado no es, nunca fue. Lo conocí, claro. Y quién no lo iba a cono­cer si se dedi­caba a andar ame­na­zando a la gente” en los pro­ce­sos lega­les, comentó la con­tra­parte de Her­nán­dez al soli­ci­tar el ano­ni­mato por razo­nes de segu­ri­dad.

Otras per­so­nas lo per­ci­bían como un hom­bre sober­bio, con mucho poder, a veces afa­ble en su trato, pero tam­bién gro­sero.

“El Padrino”

En el Poder Judi­cial de la Ciu­dad de México, Her­nán­dez Alco­cer es muy cono­cido entre jue­ces y magis­tra­dos. Incluido, en el entorno del pre­si­dente del Tri­bu­nal Supe­rior de Jus­ti­cia de la Ciu­dad de México (TSJCDMX), el magis­trado Rafael Gue­rra. Algu­nos de esos fun­cio­na­rios lo lla­man “Padrino” debido al apoyo que reci­bie­ron de su parte ante miem­bros de la enton­ces Asam­blea Legis­la­tiva del Dis­trito Fede­ral para reci­bir el espal­da­razo de éstos en los

nom­bra­mien­tos que otorga el Con­sejo de la Judi­ca­tura local.

La denun­cia de la empresa Art­hi­nia, hace 10 años, des­cribe que Her­nán­dez Alco­cer tenía, desde enton­ces, innu­me­ra­bles rela­cio­nes en el Poder Judi­cial tanto local como fede­ral y en las pro­cu­ra­du­rías capi­ta­lina y fede­ral.

La denun­cia de la empresa Art­hi­nia, hace 10 años, des­cribe que Her­nán­dez Alco­cer tenía, desde enton­ces, innu­me­ra­bles rela­cio­nes en el Poder Judi­cial tanto local como fede­ral y en las pro­cu­ra­du­rías capi­ta­lina y fede­ral.

“Acu­dió junto con el obispo a diver­sos res­tau­ran­tes como se acre­di­tará con los tes­ti­mo­nios con­du­cen­tes donde ambos seña­la­ban que ‘…ya habían com­prado dos de tres magis­tra­dos…’ que noso­tros se las per­sig­ná­ba­mos y que el minis­tro Valls y un sena­dor de la Repú­blica, de nom­bre Fede­rico Döring, con quien Jesús Her­nán­dez Alco­cer tiene una estre­cha y añeja amis­tad de nego­cios, los habían ayu­dado”, des­cri­bió la empresa.

Pro­ceso con­sultó al hoy dipu­tado local en la Ciu­dad de México Fede­rico Döring para cono­cer su pos­tura sobre esta men­cio­nada amis­tad con Her­nán­dez Alco­cer, pero al cie­rre de esta edi­ción no se obtuvo res­puesta.

La empresa denun­ciante tam­bién refi­rió la pre­di­lec­ción de Her­nán­dez Alco­cer por el Sun­tory.

La empresa denun­ciante tam­bién refi­rió la pre­di­lec­ción de Her­nán­dez Alco­cer por el Sun­tory.

“Resulta indi­cia­ria­mente evi­dente que el día de la reso­lu­ción fue­ron foto­gra­fia­dos por el perió­dico deno­mi­nado El Uni­ver­sal, al salir a fes­te­jar los tres; es decir, el obispo, Ale­jan­dro Luna Fan­diño y Jesús Her­nán­dez Alco­cer, del res­tau­rante deno­mi­nado Sun­tory en la colo­nia Del Valle”, con­signó.

“Se hace evi­dente, con la par­ti­ci­pa­ción de Jesús Her­nán­dez Alco­cer de la clara posi­bi­li­dad de la exis­ten­cia del ilí­cito de cohe­cho puesto que ambos suje­tos acti­vos (Cepeda y Matute), por con­ducto de los ‘dine­ros y amis­ta­des’ hacen gala de su impu­ni­dad.”

Her­nán­dez Alco­cer es rela­cio­nado de manera insis­tente con el magis­trado pre­Sin sidente del TSJCDMX, Rafael Gue­rra Álva­rez, quien fue con­sul­tado al res­pecto, pero rechazó hacer algún comen­ta­rio.

Her­nán­dez Alco­cer es rela­cio­nado de manera insis­tente con el magis­trado pre­Sin sidente del TSJCDMX, Rafael Gue­rra Álva­rez, quien fue con­sul­tado al res­pecto, pero rechazó hacer algún comen­ta­rio.

El declive

Su suerte cam­bió el pasado 25 de junio cuando fue acu­sado de balear a su esposa, Yrma Lydya Gam­boa Jimé­nez, de 21 años, den­tro del res­tau­rante Sun­tory, pro­vo­cando su muerte.

Her­nán­dez Alco­cer y su cho­fer, Ben­ja­mín “H”, fue­ron vin­cu­la­dos a pro­ceso el pasado 30 de junio por el delito de femi­ni­ci­dio y per­ma­ne­ce­rán suje­tos a pri­sión pre­ven­tiva de ofi­cio en el Reclu­so­rio Norte durante, por lo menos, los pró­xi­mos cua­tro meses, tér­mino con­ce­dido por el juez de con­trol para rea­li­zar la inves­ti­ga­ción com­ple­men­ta­ria.

Antes de la audien­cia, Her­nán­dez Alco­cer mani­festó sen­tirse mal y soli­citó asis­ten­cia médica. Llegó en silla de rue­das a las salas de ora­li­dad del Reclu­so­rio Oriente, a donde fue tras­la­dado. Alegó pade­cer de males cró­nico-dege­ne­ra­ti­vos. Atrás dejó la ima­gen de alti­vez que pro­yec­taba en los juz­ga­dos.

Pese a que el homi­ci­dio de la can­tante Yrma Lydya ocu­rrió frente a varias per­so­nas, la defensa argu­mentó que unas per­so­nas pre­ten­dían extor­sio­nar a la joven y que en la escena un ter­cer sujeto le dis­paró.

Pese a que el homi­ci­dio de la can­tante Yrma Lydya ocu­rrió frente a varias per­so­nas, la defensa argu­mentó que unas per­so­nas pre­ten­dían extor­sio­nar a la joven y que en la escena un ter­cer sujeto le dis­paró.

La fis­ca­lía local imputó a Her­nán­dez Álva­rez –de 79 años– por­que según los tes­ti­gos mató a su acom­pa­ñante y pos­te­rior­mente un escolta que se encon­traba den­tro del res­tau­rante lo con­tuvo y ayudó a que se le detu­viera casi de inme­diato.

Luego de ser vin­cu­lado a pro­ceso, el defen­sor de Her­nán­dez Alco­cer soli­citó per­mi­tirle lle­var su pro­ceso en liber­tad debido a su edad y pade­ci­mien­tos médi­cos.

Luego de ser vin­cu­lado a pro­ceso, el defen­sor de Her­nán­dez Alco­cer soli­citó per­mi­tirle lle­var su pro­ceso en liber­tad debido a su edad y pade­ci­mien­tos médi­cos.

embargo, quie­nes lo cono­cie­ron alguna vez no lo retra­tan como el hom­bre viejo y enfermo que se pre­sentó a la audien­cia de vin­cu­la­ción.

Damián Saith, abo­gado inte­grante del equipo de defensa de Her­nán­dez Alco­cer, comentó a Pro­ceso que ya ape­la­ron la vin­cu­la­ción a pro­ceso y, de manera para­lela, están apor­tando datos de prueba en la inves­ti­ga­ción com­ple­men­ta­ria para acre­di­tar la ino­cen­cia de su cliente.

Explicó que la muerte su esposa y ahora el pro­ceso penal que enfrenta man­tie­nen al hom­bre en un estado depre­sivo y con temor por su vida den­tro del reclu­so­rio.

“(Está) muy mal de salud, muy deli­cado y muy enfermo. Está muy preo­cu­pado de que en cual­quier momento lo vayan a que­rer matar”, dijo el abo­gado mediante un cues­tio­na­rio que se le hizo lle­gar por escrito.

“(Está) muy mal de salud, muy deli­cado y muy enfermo. Está muy preo­cu­pado de que en cual­quier momento lo vayan a que­rer matar”, dijo el abo­gado mediante un cues­tio­na­rio que se le hizo lle­gar por escrito.

“Está muy depri­mido, muy triste, muy des­con­cer­tado y a veces con­fun­dido, de ver­dad no puede creer que esté pasando esto.”

“Está muy depri­mido, muy triste, muy des­con­cer­tado y a veces con­fun­dido, de ver­dad no puede creer que esté pasando esto.”

Sobre las rela­cio­nes de su cliente con altas esfe­ras de poder, el abo­gado indicó que no exis­ten prue­bas de que lo que se ha dicho de él sea cierto. “Nos pare­cen por el momento afir­ma­cio­nes total­mente infun­da­das y, sin una prueba con­tun­dente en con­tra­rio, son espe­cu­la­cio­nes mera­mente fal­sas. Nos parece que se está haciendo un circo y una car­ni­ce­ría mediá­tica con­tra un hom­bre que toda su vida no ha hecho nada más que tra­ba­jar, y que son dichos mera­mente vacíos y caren­tes de fun­da­mento, toda vez que lo que se ha dicho no está nada pro­bado. Son fala­cias infun­da­das como las supues­tas dos espo­sas que murie­ron de manera sos­pe­chosa por parte del señor don Jesús, mis­mas que están vivas”, enfa­tizó.

Sobre las rela­cio­nes de su cliente con altas esfe­ras de poder, el abo­gado indicó que no exis­ten prue­bas de que lo que se ha dicho de él sea cierto. “Nos pare­cen por el momento afir­ma­cio­nes total­mente infun­da­das y, sin una prueba con­tun­dente en con­tra­rio, son espe­cu­la­cio­nes mera­mente fal­sas. Nos parece que se está haciendo un circo y una car­ni­ce­ría mediá­tica con­tra un hom­bre que toda su vida no ha hecho nada más que tra­ba­jar, y que son dichos mera­mente vacíos y caren­tes de fun­da­mento, toda vez que lo que se ha dicho no está nada pro­bado. Son fala­cias infun­da­das como las supues­tas dos espo­sas que murie­ron de manera sos­pe­chosa por parte del señor don Jesús, mis­mas que están vivas”, enfa­tizó.

Aña­dió que ni Her­nán­dez Alco­cer ni nadie cer­cano a él les ha refe­rido algo sobre estos vín­cu­los.

El jue­ves 7 la fis­cal gene­ral de la CDMX, Ernes­tina Godoy, afirmó que la ins­ti­tu­ción que enca­beza tiene una “inves­ti­ga­ción sólida y con los datos de prueba nece­sa­rios para con­ti­nuar el pro­ceso legal” con­tra Her­nán­dez Alco­cer como pre­sunto res­pon­sa­ble de femi­ni­ci­dio.

El jue­ves 7 la fis­cal gene­ral de la CDMX, Ernes­tina Godoy, afirmó que la ins­ti­tu­ción que enca­beza tiene una “inves­ti­ga­ción sólida y con los datos de prueba nece­sa­rios para con­ti­nuar el pro­ceso legal” con­tra Her­nán­dez Alco­cer como pre­sunto res­pon­sa­ble de femi­ni­ci­dio.

Ase­guró que la fis­ca­lía tiene tes­ti­mo­nios, videos, dic­tá­me­nes peri­cia­les en balís­tica, mecá­nica de hechos para ini­ciar el pro­ceso penal.

“Como gángs­ter”

Uno de los empre­sa­rios para los que Her­nán­dez Alco­cer ha ope­rado mediante ame­na­zas e inti­mi­da­ción fue Raúl Arturo Pinto Her­nán­dez, accio­nista de Tec­no­pro­gra­ma­ción Humana Espe­cia­li­zada en Sis­te­mas Ope­ra­ti­vos, S.A. de C.V. (Theos).

La com­pa­ñía fue una de las bene­fi­cia­das entre 2001 y 2003 con los con­tra­tos del fallido pro­grama Enci­clo­me­dia, impul­sado durante el gobierno de Vicente Fox.

La com­pa­ñía fue una de las bene­fi­cia­das entre 2001 y 2003 con los con­tra­tos del fallido pro­grama Enci­clo­me­dia, impul­sado durante el gobierno de Vicente Fox.

La empresa fue seña­lada de colu­dirse con Infor­má­tica Inte­gral Admi­nis­tra­tiva, Inte­gra­do­res de Tec­no­lo­gía, TED Tec­no­lo­gía Edi­to­rial y Cor­po­ra­tivo Lanix con el pro­pó­sito de ajus­tar sus pre­cios en 10% para bene­fi­ciarse entre sí y obte­ner las lici­ta­cio­nes del pro­grama de manera dife­ren­ciada en diver­sas regio­nes del país.

Theos con­ti­núa como pro­vee­dor del gobierno fede­ral pues en febrero de 2021 la Secre­ta­ría de Hacienda le otorgó un con­trato con un pre­su­puesto asig­nado de 1 millón 748 mil pesos a 1 millón 920 mil pesos por la renta de entre 500 y 550 lec­to­res de DVD y de entre 92 y 101 video­pro­yec­to­res.

El hijo de Pinto Her­nán­dez man­tiene desde hace ocho años un pleito legal con su exes­posa, cuyo nom­bre se omite por razo­nes de segu­ri­dad, para qui­tarle a sus cua­tro hijos.

Desde la cap­tura de Her­nán­dez Alco­cer, la abo­gada Jés­sica Gon­zá­lez Her­mo­si­llo expuso en redes socia­les que ella for­maba parte del equipo de cua­tro abo­ga­dos –dos hom­bres y dos muje­res– que defen­dían a la mujer.

Ase­guró que el hoy acu­sado de femi­ni­ci­dio ame­nazó a dos de sus com­pa­ñe­ros logrando com­pli­car el liti­gio.

“Yo tenía guarda y cus­to­dia de mis hijos. Mi exma­rido se va de la casa en 2015 y deja de pagar cosas. Empieza a dar una pen­sión que no era ni la cuarta parte de lo que uti­li­zá­ba­mos para vivir y man­te­ner la casa. El divor­cio se dio en 2016 y en febrero de 2017 llega con un nota­rio para decir­nos que nos tenía­mos que salir de la vivienda y apro­ve­chó para decirme que ya no iba a pagar el cole­gio de los niños”, explica la mujer en entre­vista con Pro­ceso.

“Yo tenía guarda y cus­to­dia de mis hijos. Mi exma­rido se va de la casa en 2015 y deja de pagar cosas. Empieza a dar una pen­sión que no era ni la cuarta parte de lo que uti­li­zá­ba­mos para vivir y man­te­ner la casa. El divor­cio se dio en 2016 y en febrero de 2017 llega con un nota­rio para decir­nos que nos tenía­mos que salir de la vivienda y apro­ve­chó para decirme que ya no iba a pagar el cole­gio de los niños”, explica la mujer en entre­vista con Pro­ceso.

Por ello se fue a vivir a Puerto Vallarta, Jalisco, donde tiene fami­lia. Los abo­ga­dos que en aquel enton­ces la repre­sen­ta­ban no pidie­ron –como lo exige la ley– auto­ri­za­ción al juez 32 fami­liar de la Ciu­dad de México que cono­cía del asunto, sino que úni­ca­mente le avi­sa­ron.

Las ape­la­cio­nes del caso han sido tur­na­das a la Pri­mera Sala Fami­liar en la ponen­cia del magis­trado Lázaro Teno­rio Godí­nez, quien le “reco­mendó” salir del país con sus hijos para evi­tar que le hicie­ran daño.

“Vine a la Ciu­dad de México a hablar con el magis­trado que le tocó ver mi caso y ese día me dijo que mi inte­gri­dad física peli­graba por­que para per­so­nas así era más fácil desa­pa­rela cerme y here­dar a los niños, y me dijo que sabía por qué me había ido, que seguro les estaba dando mejor cali­dad de vida a mis hijos y me llegó a decir ‘tú eres ame­ri­cana y tus hijos tam­bién, ¿por qué no te pro­te­gen las leyes de allá?’”, relató.

“Vine a la Ciu­dad de México a hablar con el magis­trado que le tocó ver mi caso y ese día me dijo que mi inte­gri­dad física peli­graba por­que para per­so­nas así era más fácil desa­pa­rela cerme y here­dar a los niños, y me dijo que sabía por qué me había ido, que seguro les estaba dando mejor cali­dad de vida a mis hijos y me llegó a decir ‘tú eres ame­ri­cana y tus hijos tam­bién, ¿por qué no te pro­te­gen las leyes de allá?’”, relató.

Su padre intentó inter­ve­nir reco­men­dán­dole otros defen­so­res, pero sus abo­ga­dos le dije­ron que era buena idea irse a San Anto­nio, Texas, donde tam­bién tiene fami­lia, para estar pro­te­gida y le ase­gu­ra­ron que ellos se harían cargo de todo.

La mujer y sus hijos cru­za­ron la fron­tera con Esta­dos Uni­dos en junio de 2018 y 10 meses des­pués ele­men­tos poli­cia­les saca­ron a sus hijos, de enton­ces 13, 10, nueve y cinco años, de la escuela, en Texas, para lle­var­los con su papá, quien ya había con­se­guido que el magis­trado Teno­rio le con­ce­diera la guarda y cus­to­dia pro­vi­sio­nal.

Al regre­sar a los meno­res a México, el juez 32 fami­liar por minis­te­rio de ley (pro­vi­sio­nal), Ernesto Villa­rreal, ordenó rea­li­zar una plá­tica con los niños. En esa dili­gen­cia, rea­li­zada el 14 de agosto de 2019, los niños dije­ron que no que­rían estar con su papá. Incluso dos de ellos afir­ma­ron que ya no que­rían vol­ver a verlo nunca.

El juez deter­minó dar en depó­sito legal a los niños a su madre bajo la con­di­ción de que ellos no pue­dan salir de la Ciu­dad de México. Fue en ese momento que la mujer se encon­tró por pri­mera vez con Her­nán­dez Alco­cer.

“Cuando el juez ya había resuelto devol­verme a mis hijos lle­ga­ron dos suje­tos que no eran parte de esto y se metie­ron a ofi­cina del juez. Uno traía un traje caqui; otro se veía como gángs­ter, con tiran­tes ama­ri­llos. Se metie­ron con el juez, empe­za­ron a hablar, luego me lla­man y el de tiran­tes ama­ri­llos me dijo: ‘Sí, te vamos a dar visi­tas con tus hijos; ya lo pla­ti­ca­mos, te vamos a dar visi­tas’. Yo dije que no, que yo no que­ría visi­tas, yo que­ría a mis hijos”, recordó.

“Cuando el juez ya había resuelto devol­verme a mis hijos lle­ga­ron dos suje­tos que no eran parte de esto y se metie­ron a ofi­cina del juez. Uno traía un traje caqui; otro se veía como gángs­ter, con tiran­tes ama­ri­llos. Se metie­ron con el juez, empe­za­ron a hablar, luego me lla­man y el de tiran­tes ama­ri­llos me dijo: ‘Sí, te vamos a dar visi­tas con tus hijos; ya lo pla­ti­ca­mos, te vamos a dar visi­tas’. Yo dije que no, que yo no que­ría visi­tas, yo que­ría a mis hijos”, recordó.

“Esto me lo dijo delante del juez y a pesar de ello, él se man­tuvo en su deci­sión de devol­verme a mis hijos, entiendo que entra­ron para hacerlo cam­biar de opi­nión, no sé qué habla­ron antes por­que lo hicie­ron sin mí, ellos se metie­ron a la ofi­cina y a pesar de ello, el juez se sos­tuvo con su deci­sión.”

El exma­rido denun­ció al juez y al secre­ta­rio de Acuer­dos y logró que Villa­rreal se excu­sara y ahora el expe­diente se encuen­tra estan­cado en el juz­gado 33 fami­liar.

En diciem­bre de 2019 la mujer apro­ve­chó para ir a hablar nue­va­mente con el magis­trado Teno­rio Godí­nez con la inten­ción de gra­bar la con­ver­sa­ción.

Uno de sus abo­ga­dos tenía cono­ci­miento de ello. Durante la reu­nión el magis­trado negó haberle reco­men­dado salir del país. Ella sos­pe­cha que dicho abo­gado alertó al juz­ga­dor por­que incluso éste se comu­nicó con el liti­gante para avi­sarle que su cliente se encon­traba en su ofi­cina.

Pro­ceso buscó al magis­trado para tener su ver­sión sobre estas ase­ve­ra­cio­nes, pero al cie­rre de esta edi­ción no había res­pon­dido la soli­ci­tud.

Los dos hom­bres del equipo de la abo­gada Jés­sica Gon­zá­lez fue­ron cita­dos por Her­nán­dez Alco­cer ese mes en el mismo res­tau­rante de siem­pre: el Sun­tory.

Los dos hom­bres del equipo de la abo­gada Jés­sica Gon­zá­lez fue­ron cita­dos por Her­nán­dez Alco­cer ese mes en el mismo res­tau­rante de siem­pre: el Sun­tory.

Uno de esos abo­ga­dos fue el mismo al que el magis­trado Lázaro Teno­rio llamó para avi­sarle que su cliente estaba en su ofi­cina.

“Recuerdo que (dicho abo­gado) me comentó que este señor llegó con pis­tola en mano y dijo: ‘A ver, yo vengo de parte de Raúl (mi exsue­gro), su hijo es un pen­dejo, yo vengo aquí por las bue­nas o por las malas pero me van a dar a los niños”, indicó la mujer.

Días des­pués, el magis­trado Lázaro Teno­rio revocó la orden del juez 32 fami­liar y con­ce­dió la guarda y cus­to­dia al padre de los niños, pero la sus­pen­sión de pla­zos decre­tada por la pan­de­mia del covid-19, jugó a favor de la mujer y sus hijos.

Aun­que el empre­sa­rio ha con­ti­nuado inter­vi­niendo en el asunto bajo ame­na­zas direc­tas a la madre de sus nie­tos, Her­nán­dez Alco­cer ya no vol­vió a tener con­tacto con ella ni con la abo­gada Jés­sica, que es la única del equipo de cua­tro liti­gan­tes que aún con­ti­núa repre­sen­tán­dola.

Aun­que el empre­sa­rio ha con­ti­nuado inter­vi­niendo en el asunto bajo ame­na­zas direc­tas a la madre de sus nie­tos, Her­nán­dez Alco­cer ya no vol­vió a tener con­tacto con ella ni con la abo­gada Jés­sica, que es la única del equipo de cua­tro liti­gan­tes que aún con­ti­núa repre­sen­tán­dola.

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