Cuando un asunto no es de la incumbencia del individuo, lo mejor es no involucrarse y dejar que el agua siga su curso natural. Esta filosofía se lleva aplicando al problema del agua en la capital sonorense, desde que el Gobernador Armando López Nogales propuso una planta desaladora, y por politiquería aún se sigue viendo como un proyecto a futuro, incluso hoy en día retomado por el actual Gobernador Alfonso Durazo.
Hermosillo, la ciudad del sol, la capital sonorense está en una crisis de agua y el gobierno aparentemente nada hace al respecto. Bienvenidos a El Rastro, un espacio dónde perseguimos la noticia.
La cantidad de agua disponible de las cuencas de los ríos con las que se abastece la mayor parte de la demanda en la capital del estado es la misma desde hace cientos de años, pero ha cambiado el consumo debido al crecimiento de la población, aseguró Ignacio Lagarda, cronista de Hermosillo para El Imparcial en una nota publicada el 27 de Julio.
En la nota se explica que la ciudad cuenta con dos cuencas: La del Río Sonora y la del Río San Miguel, que aportan al municipio un total de 287 millones de metro cúbicos al año. También explicó que por estar ubicado en la Costa de Sonora, la cantidad de lluvia es muy poca, ya que la región se encuentra frente al Golfo y la Península de California, lo que no permite que la humedad del Océano Pacífico beneficie, y la única esperanza es el agua que llega gracias a las lluvias o ciclones.
Actualmente estamos entrando a una temporada de lluvias extensas, agua que no es recolectada de ninguna forma por falta de infraestructura, a pesar de ser una de las principales ciudades en el noroeste de México, Hermosillo está a unos cuantos pasos de acabar como Nuevo León.

Monterrey, el futuro de la capital Sonorense
Tenemos que comprender que Monterrey es la segunda ciudad más grande de México, en la que viven más de 5,3 millones de personas, la ciudad más rica de Latinoamérica, y aún así el gobierno federal nada hace por ayudar a los regios con una sequía que actualmente es catalogada como “extrema” y está en su punto más álgido este mes ¿eso le pasaría a Sonora con un gobernador tan cercado al Presidente?
Con temperaturas que superan los 40°C, sus habitantes tienen que arreglárselas para subsistir con solo seis horas al día de bombeo de agua potable, una restricción nunca antes vista e implementada por las autoridades para racionar lo que queda en sus represas.
Las reservas están prácticamente secas, como la presa de Cerro Prieto (2%) o La Boca (9%).
Por si fuera poco, en las tiendas hay días en que no se consigue agua embotellada para beber, incluso en los barrios más ricos de una urbe industrial que siempre se ha preciado de tener un nivel de desarrollo superior al resto de México.

Ayuntamiento de Hermosillo
Nuestro tricolor Presidente Municipal, más preocupado por sonreir a las cámaras que resolver el problema del liquido vital, está dejando que desear al estar más preocupado por hacer de su administración una plataforma política a costa de endeudar aún más la ciudad, como por ejemplo actualmente con la compra, hasta la fecha de 40 patrullas eléctricas de la marca china JAC, modelo ESei4 Pro, con un costo al público de $774,000 pesos mexicanos, según su página web oficial. Pero ¿y los baches?
Durante los últimos años, los hermosillenses han señalado mediante la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), que realiza el Instituto Nacional de Estadística y Geografía tres veces anualmente, que el problema en el deterioro de calles es el tema más importante que ven en la ciudad.
Por lo que en el 2021, Hermosillo se posiciona a nivel nacional como la ciudad que más sufre este problema por tercer año consecutivo.
En los resultados del tercer trimestre del 2021 de la ENSU, presentó que 97.9% de los hermosillenses entrevistados consideraron que era un problema importante.
¿Que tienen que ver los baches con la problematica del agua?
Para responder esta pregunta tenemos que saber que, no contentos con ser la ciudad con más baches, también somos la tercer ciudad con más fugas de agua.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), indicó que, durante el tercer trimestre del 2021, Hermosillo se ubicó en tercer municipio en el país donde la percepción de fugas es un problema serio.
El 87.6 por ciento de los hermosillenses con una edad mayor a 18 años identificó fallas y fugas en el suministro de agua potable, lo que refiere que 8 de cada 10 personas de la ciudad percibieron esta problemática, con información de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU).
Al final entendemos que para arreglar el problema histórico de los baches, tendriamos que cambiar el sistema de agua y drenaje en todo el municipio, para apartir de ahí cambiar el asfalto por pavimento hidráulico, y así asegurar calles sin baches por al menos 30 años.
La conclusión es que el problema del agua en Hermosillo es causa y efecto de la innactividad por parte de los tres niveles de gobierno, en un país donde están más preocupados en las elecciones presidenciales que por la vida, pero hay que dejar claro algo:
Señores gobernantes, líderes sociales y congresistas. Sin agua no hay vida, y los muertos votan pero no pagan impuestos, y sin los impuestos ustedes no podrían hacer campaña y fortuna.