Tras la irrupción de una célula asociada a Cárteles Unidos en San Juan Nuevo Parangaricutiro se suscitó un enfrentamiento con agentes comunitarios que dejó al menos cinco muertos y 32 detenidos.

Fuentes de autoridades que participaron en el caso confirmaron a Infobae México que alrededor de las 08:00 horas de este 10 de marzo ingresó un grupo criminal que opera desde los Reyes, asociado a otras células locales que se conjuntaron para combatir al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Los integrantes del concilio de Cárteles Unidos realizaron disparos hacia pobladores de la demarcación que se encontraban en inmediaciones de la presidencia municipal, por lo cual la guardia comunitaria repelió la balacera y arribaron agentes estatales y federales en apoyo.

Según los informes proporcionados a este medio, al verse rodeados y confrontados por la ronda comunitaria, los agresores intentaron darse a la fuga, pero fueron perseguidos hasta lograr asegurarlos. En redes sociales difundieron videos sobre golpes con palos a civiles que participaron en la irrupción.

Al sitio arribaron el secretario de Seguridad de Michoacán, José Alfredo Ortega Reyes, así como el coordinador estatal de la Guardia Nacional, Gregorio Francisco López Carreño y el comandante de la 21 Zona Militar, Francisco Javier Subía González. Todos acompañados por decenas de patrullas y elementos de seguridad.

Ortega Reyes indicó que los detenidos ya eran trasladados a Morelia, capital del estado, para ponerlos a disposición de autoridades ministeriales. La Fiscalía de Michoacán se encontraba en el procesamiento de la escena criminal con el levantamiento de indicios, casquillos y de los cuerpos. Un autobús fue impactado en medio de la refriega.

Tienen una ronda comunitaria, entonces, estamos en posibilidades establecerles un patrullaje y si así lo aceptan una una base de operaciones en en la entrada y salida del pueblo

Va a ser a petición de ellos, porque como saben ustedes, es una comunidad indígena y van a decidir si aceptan este apoyo

Hasta ahora no se ha precisado de qué grupo delictivo son los detenidos, si solo son de quienes irrumpieron o también pertenecen a otra de las facciones que se disputan el territorio por parte del CJNG. Este último grupo criminal se mantiene bajo el liderazgo regional de los líderes conocidos como el Fantasma y el Panter.

Tras las detenciones y el enfrentamiento también se registraron bloqueos en inmediaciones de Uruapan, tanto en el tramo carretero que conecta con Paracho, Jucutacato y Arroyo Colorado. Las autoridades no han especificado si estos cortes de circulación están relacionados con el caso en San Juan Nuevo Parangaricutiro.

De manera inicial solo pudieron ingresar la Guardia Nacional, fiscalía michoacana y Protección Civil, quienes fueron autorizados por la comunidad, por temas de usos y costumbres que prevalecen en el pueblo de origen Purépecha. Sin embargo, policías estatales y el Ejército desplegaron labores de vigilancia en la zona.

Usuarios de redes sociales compartieron desde temprano las balaceras registradas. También, sobre como corrían los pobladores para resguardarse al escuchar detonaciones en el Palacio Municipal. Previamente, un clip mostró un vehículo con blindaje artesanal, también conocido como monstruo, por las calles de la región y con un sicario realizando disparos de grueso calibre desde la parte de arriba.

En los últimos tres años, la alianza del CJNG con grupos de Michoacán se fracturó y remanentes de Viagras, Caballeros Templarios, Blancos de Troya y Cártel de Tepalcatepec formaron una alianza conocida como Cárteles Unidos, para resistir el embate del cártel de las cuatro letras. Sus pugnas se han agudizado en la región de Tierra Caliente y cerca de la capital mundial del aguacate, el llamado oro verde, en Uruapan.

A mediados de 2021, en junio, presuntos miembros del CJNG irrumpieron por la madrugada y emboscaron a policías del estado que se encontraban en San Juan Nuevo Parangaricutiro. El comando de las camionetas actuó en represalia tras la muerte del Comandante Raya. Las huellas de los impactos quedaron en fachadas de casas, puertas y ventanas. Dos policías resultaron lesionados aquella vez.