Por estos días tienen lugar en la Embajada de Cuba de la CDMX los cursos de formación que el PT ha dispuesto para diputados y regidores. Se trata de una iniciativa de Alberto “Profe” Anaya, quien busca darle mayor densidad ideológica a los representantes de su partido.
En los cursos, que son impartidos por capacitadores mexicanos (Cuba solo ofrece sus instalaciones de la Avenida Masaryk) se estudia teoría política, historia de las revoluciones, historia de la lucha contrainsurgente y nociones de economía popular. Anaya ahora también incentiva el aprendizaje del ruso para lo cual se ofrecen algunas estancias educativas en Moscú.
Los asistentes a los cursos comentaron a LPO que además reciben un libro personalizado, de buena calidad impresa en el cual vienen incluidas leyes y normas que estos deben aprender según su función legislativa.
Si bien parece un detalle colorido, casi nostálgico, el nexo de Anaya con Cuba, Rusia o Corea del Norte es un elemento que es manejado con sumo cuidado por Palacio Nacional debido a las implicancias que esos contactos pueden generar en la relación con Estados Unidos.
Por ejemplo, Anaya es partidario, y así se lo ha expresado a Marcelo Ebrard, de restaurar la relación diplomática con norcoreana, vinculo que se quebró por decisión de Luis Videgaray en el sexenio anterior. De momento el canciller resiste el pedido.
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