AHORA que el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, reclamó a Lorenzo Córdova por una supuesta intromisión del INE en temas que competen a los legisladores por haberse osado a fijar los lineamientos para la consulta de revocación de mandato, hay quienes piensan que hay otra razón de fondo para ese pataleo.
LOS CONSEJEROS quieren prohibirle a los partidos recabar firmas para convocar a ese proceso, así como utilizar recursos públicos para difundirlo, como sí lo hicieron en la fallida consulta para el enjuiciamiento de ex presidentes, que de todas maneras salió carísima y tuvo una bajísima participación de los ciudadanos.
Y COMO que eso ya no les gustó a los morenistas y sus aliados, quienes, ante esas restricciones, no podrían echar a andar su maquinaria de “movilización”, lo que limitaría su capacidad de influir en ese ejercicio ciudadano y lograr que todo salga tal y como lo quiere “ya saben quién”.
LLAMA la atención que Andrés Manuel López Obrador diga que el freno a la revocación de mandato, en el Congreso de la Unión, se debe a que Carlos Salinas de Gortari ¡sigue mandando en México!
Y ES QUE, una vez más y como lo ha hecho desde hace años, el Presidente vuelve a echarles la culpa a los salinistas a pesar de que él ya lleva tres años en el gobierno y de que todo este tiempo ha estado ¡rodeado de ex colaboradores de Salinas!
PORQUE no hay que buscar mucho para encontrar entre sus más cercanos a varios cuadros que formaron parte del gobierno en aquel sexenio, como: Manuel Bartlett, Alfonso Durazo, Marcelo Ebrard, Esteban Moctezuma, Ignacio Ovalle o Roberto Salcedo.
TAL PARECE que, con todo y que en alguna época lo apodaba “El Innombrable”, López Obrador acaba siempre por necesitar de su viejo “adversario” y villano político favorito para sacarse de la manga justificaciones cuando no se hace su santa voluntad.
UNA MALA: el huracán “Grace” se enfila hacia el centro del país y podría provocar hoy destrozos e inundaciones en Hidalgo, el Estado de México y la CDMX.
UNA BUENA: es la mejor oportunidad que tienen las presas del Sistema Cutzamala para recuperar su nivel después de un año de crisis histórica que le ha pegado, y duro, al abasto de agua en el Valle de México.
Y UNA PREOCUPANTE: que los extremos provocados por el cambio climático le están pegando cada vez más fuerte a una zona del país que pasó, en unas cuantas semanas, de la desesperación por la sequía al miedo a las inundaciones.