El presidente López Obrador es un “animal político”. Encaja perfectamente en todo sentido, con todos los sentidos, en esa famosa frase del filósofo Aristóteles. Y por ello podríamos pensar que deliberadamente ordenó que ilegales centroamericanos cruzaran la frontera mexicana en su peregrinar hacia Estados Unidos para solicitar asilo político.
La razón, muy sencilla: Acuñar una moneda de cambio con su homólogo gabacho, Joe Biden, para intercambiar el sellar la frontera sur de México por vacunas contra el Covid.
El trueque, obviamente, beneficia a México.
Según los últimos reportes de autoridades estadounidenses, aumentó al doble el flujo de centroamericanos indocumentados que buscan llegar al gabacho.
Bueno, si México suaviza su política migratoria para ingresos ilegales, los centroamericanos aprovecharán la situación.
Los ilegales y López Obrador hacen buen equipo. Y están a punto de conectar jonrón.
Se supone que ya hay un acuerdo: Estados Unidos prestaría a México 2.5 millones de vacunas AstraZeneca, que aún no autorizan para su población, a cambio de reducir el tráfico de indocumentados.
El gobierno de la 4T tiene experiencia en esas lides: Ya realizó la misma operación con Donald Trump. En esa ocasión prácticamente se abrió la frontera sur para permitir el acceso de verdaderas oleadas de centroamericanos. El trueque, si mal no recordamos, fue por aranceles en el intercambio comercial.
AMLO entiende perfectamente que su proyecto transexenal está en juego en el combate contra la pandemia.
Y va perdiendo el juego.
Tiene que remontar el marcador.
Y por ello saca a relucir lo mejorcito de su fama de ser un auténtico “animal político”.
El mote, para todo político, es un halago.
Ojalá que AMLO haga otros trueques de este tipo para inmunizar a la población, sobre todo del norte del país, tan minimizada por el actual régimen.
Por eso podrían perder todas y todos los legisladores que buscan su reelección. Nunca gestionaron beneficios ni recursos para el Estado.
A López Obrador le conviene ordenar vacunar a toda la población norteña, en aras de quedar bien con Joe Biden: Estados Unidos mantendrá el cierre de sus fronteras con México por lo menos hasta el próximo 21 de abril para evitar la propagación del Covid-19.
Y paralelamente, reportan que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos realizó un ejercicio de preparación operativa que incluyó equipo táctico y bombas de humo en el puerto de entrada de San Ysidro
Se escucharon fuertes detonaciones como parte del simulacro.
El ejercicio llamó la atención de los inmigrantes que están en Tijuana buscando asilo en Estados Unidos.
Fanny Velázquez, de Honduras, acudió al puerto de entrada con su bebé de 5 meses en brazos y se aproximó a la zona del simulacro en cuanto escuchó las detonaciones procedentes del lado izquierdo de la garita.
“Vimos salir humo y escuchamos las explosiones”, dijo. “Estábamos en el otro lado, cerca del puente, y le dije a un amigo que allí estaba pasando algo, así que vinimos a ver”.
Llegó con un grupo de inmigrantes, que observaron los últimos momentos del simulacro desde el lado mexicano de una malla instalada en la línea que divide los dos países.
El grupo dijo que se dirigía al lado del paso fronterizo de El Chaparral, a pocas cuadras de allí, donde decenas de personas montaron un campamento en el que esperan mientras esperan la oportunidad de pedir asilo en Estados Unidos.