Ciudad Juárez, Chihuahua.- En el gimnasio del Colegio de Bachilleres de esta ciudad fronteriza, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue recibido con protestas por parte de activistas y ciudadanos contra la instalación de una mina de cobre a cielo abierto en Salamayuca y dos mantas contra la familia LeBarón.
“Los LeBaron perdieron pozo en la Mojina de forma ilegal” y “El ejido Constitución víctima de los LeBarón”, se le leía en las mantas que estaban dentro conjunto deportivo. Mientras los activistas con altoparlantes y a gritos arengaban “¡no a la mina!”.
El mandatario dijo que no se impondrá nada y se comprometió a revisar si se permitirá la operación en una mina en Samalayuca, porque de acuerdo a pobladores contaminará el agua y el suelo. Después, instruyó a la secretaria de Economía, Graciela Márquez, para que atienda personalmente el caso.
También defendió al gobernador de Chihuahua, Javier Corral, luego de que sus seguidores abuchearon al panista severamente durante su mensaje que sólo fue de un minuto con 30 segundos.
López Obrador se refirió a la buena coordinación que tiene con el gobernador, lo que provocó protestas entre los asistentes.
Ante la rechifla y los gritos de “fuera, fuera, fuera”, el titular del Ejecutivo realizó una consulta a mano alzada en donde ganó la opción dejar atrás las diferencias porque “la patria es primero”.