El consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), Marco Antonio Baños Martínez, aseveró que la Secretaría de Gobernación (Segob) les solicitó que le traslade la base de datos biométricos de más de 90 millones de ciudadanos, sin embargo, fue negada.
De acuerdo con El Universal, el funcionario señaló que la institución protegerá los datos personales de los 90.1 millones de mexicanos que se encuentran en esa base.
Asimismo, aseveró que se quiere evitar el manejo político de los datos.
“No queremos disputas políticas de nueva cuenta por un uso indebido del padrón electoral y eso es lo que el gobierno no ha querido asumir como un compromiso. (…) El INE sostiene enfáticamente que es necesario que el padrón se mantenga en la administración de una institución autónoma y que no dependa del gobierno”, señaló.
El pasado 2 de enero se informó que ante el robo de identidad –como la duplicidad y padrones falsos de programas sociales– el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) buscará blindar a los mexicanos con información biométrica de huellas digitales, rostro e iris.
Los datos obtenidos se vincularían con la Clave Única de Registro de Población (CURP) y pasarían a formar parte del Registro Nacional de Población (Renapo).
En México, 127 millones 192 mil mexicanos coexisten para inicio de este año, de acuerdo con previsiones del Consejo Nacional de Población (Conapo).
