Exudan buena relación la priísta Claudia Pavlovich y el creador del partido Morena, Andrés Manuel López Obrador…
Cierto que no son viejos camarada. Pero el respeto se trasluce, se exhibe,
¿La negociación – compra por parte de la Federación– de los estadios de beisbol de Hermosillo y Cajeme que ayudarán al gobierno estatal a atender la falta de recursos del ISSSTESON, les gusta como ejemplo?
Solución que ayudará, también, a enderezar la mueca en el rostro de Pedro Ángel Contreras y dará fin a su dramatismo de comadres. Más claros: Pedro Ángel dejará de andar de llorón y quizá se comporte a la altura de las circunstancias.
¿Les parece mejor el ejemplo del subsidio federal a la luz, que beneficia a todos los hogares sonorenses, aceptado por AMLO a propuesta de la gobernadora?
… ¿Qué más, qué más… como ejemplos de esta buena relación?
La carretera federal que ya merito se termina de construir… el simbolismo de afabilidad, cuando el atento “Peje” le dio “raite” a Claudia en su famoso tsurito, allá en la contaminada Ciudad de México.
Sin contar, pues, los recursos federales en la construcción de nuevos hospitales… etcétera.
Entre gente del oficio la especulación interpretativa de esta buena relación corre como agua libre… de entrada, el concepto de institucionalidad es muy socorrido…
Es decir, el respeto AMLO-Pavlovich tiene que ver con el normal respeto que obligan las instituciones: del Presidente con la Gobernadora.
Hay otra interpretación. El hecho mismo de ser Claudia una gobernadora dedicada a su responsabilidad, cuidando los indicadores de empleo y de inversión, y con un clarísimo perfil de género que alienta, en los hechos y en lo legal, la participación de la mujer y el respeto absoluto a su integridad.
Este perfil de Claudia le ha merecido reconocimiento en la CONAGO, el organismo que reúne a los gobernadores del país y los mete en la solución de los grandes problemas nacionales.
¿Es extraña, entonces, la buena relación entre Claudia y AMLO?… para nada… ya, a estas alturas, se antoja natural, harto justificada.
Así que los chismes de lavadero de chairos y contra chairos, son eso… mugres chismes de lavadero.
JAVIER VILLARREAL, SU (ETERNO) OPORTUNISMO
Terminó su beca de diputado local y ya debió gastarse los ahorros que alcanzó acumular… y es que el dinero se va, se va y se va…
Pero más que eso, a los líderes (de papel) de la CTM le hacen falta dependencias donde cobrar, posiciones políticas que degustar, reconocimientos que ostentar.
El pretexto es viejo – Javier Villarreal, como diputado local no movía un dedo – por la falta de adecuada atención en el IMSS… que ahora amenaza recrudecerse, cuando el gobierno de AMLO ejerce una democracia de desempleados y de austeridad que gravita en la mesa de los mexicanos.
¡Qué mejor momento!, fraguó Javier… falta de atención al IMSS y por quítame estas pajas en el INFONAVIT, organismo éste último del que históricamente se han servido (con cuchara grande) los dirigentes cetemistas, algunos más charros que el nayarita.
Pero Javier vive su propia locura… lanzando amenaza de huelgas en dos mil empresas… y, claro, ya inquietó a algunos funcionarios federales… ya preocupó a la gobernadora… y ya despertó la ambición de sus cómplices…
… “así, tan claro”, diría Florentino.
¡Claro!, falta el manotazo que quizá le recuerde que “para tener la lengua larga, hay que tener la cola corta”.
Hasta pronto