Todo hace indicar que el PRI entregará Hermosillo a Morena.
¿Qué negociaron?
¿Distritos electorales, impunidad para El Maloro Acosta?
Quién sabe.
Mientras, los costos de la derrota para el candidato derrotado, Ernesto de Lucas, deben servir de reflexión para la militancia priista que aguanta a pie firme:
Dicen que hubo mucha lana desviada. Y por ahí se fueron demasiados votos.
Personajes regularmente bien informados deslizan: Líderes del PRI, las AVES de Alejandro López Caballero y operadores electorales se quedaron con la lana, unos se la guardaron en sus bolsillos y otros se la fueron a gastar en casinos.
Entre éstos mencionan a Juan El Gordo Miller (antes ligado al padrecismo), quien manejaba a grupos de choque, cholos armados con palos y cadenas. A ellos los despachó temprano y les entregó la mitad de lo convenido. El operador se habría quedado con 350 mil pesos en efectivo… y a jugar a los casinos.
¿Cuántos operadores del Pato habrían actuado de la misma forma?
Mientras, en el PRI Hermosillo se ve a gente haciendo fila, esperando que les paguen. Las expectativas de cobrar son nulas. Ya terminó la campaña. Y fueron derrotados.
En tanto, líderes y operadores a gusto, disfrutando de la derrota en casinos, apostando dinero del Pato y Maloro.