El llamado puntero en las elecciones presidenciales, Andrés Manuel López Obrador, dejó de mostrar esa arrogante pose de seguro triunfador por una imagen de candidato nervioso.

No es percepción.

Es realidad.

El nerviosismo es reflejo de sus miedos: Que el Jefe Diego y Salinas se unen para frenarlo, que el INE es sospechoso por su lentitud para el conteo de votos del PREP, que esto, que lo otro. Y para rematar un grueso contingente de empresarios, de los pesados, le acaban de mostrar su adhesión al priista José Antonio Meade.

Con sus hechos, AMLO podría generar incertidumbre entre sus seguidores.

Muchos de sus simpatizantes eran jóvenes que hoy voltean hacia El Bronco.

El voto reflexivo podría cerrar la elección, un escenario que debe odiar López Obrador, porque eso significaría judicializar la elección y propiciar un fallo adverso en tribunales.

El dinero es poderoso en este tipo de situaciones. Es un voto decisivo.

Si los mercados financieros lucen nerviosos, AMLO y su estado mayor reflejan mayor nerviosismo.

Al principio de la contienda AMLO minimizó a los dinosaurios priistas, que estaban divididos.

Hoy que se unieron en defensa de sus intereses dejan ver un parque jurásico que podría ser letal para AMLO.

Por eso, al presentarse un cambio de escenario en el cierre final, El Peje contrató los servicios de un verdadero ejército de bots. Son robotos. No votan, Su función es generar una falsa imagen de simpatizantes.

Sí, la elección podría cerrarse.

Pero para ello sería necesario que Ricardo Anaya se desfondara totalmente, para que el voto útil antipejista se vaya con Meade.

El gran capital puede jugar un rol fundamental en ese aspecto.

Como ya lo hizo con Margarita Zavala.

Total, que el nerviosismo del Peje y sus principales colaboradores se podría extender a Sonora, afectando en el centro de su fórmula de candidatos a senadores.

El efecto es en cadena.

Es algo normal.

Igual que la fórmula de candidatos al Senado por el PAN, que resintió un duro golpe con la detención de los jefes panistas en el anterior sexenio, el del padrecismo y sus excesos. Si a alguien se le había olvidado la anterior película, hoy la reestrenaron. Y genera sentimientos de rechazo hacia la marca PAN

Aquí ya se ha expuesto la tesis: Lo valioso en la jornada electoral es la estructura. Y precisamente en ese punto radica la fuerza del PRI, tanto a nivel nacional como regional.

Y el gran componente que nunca debe faltar: Dinero, mucho dinero.