Usted puede escoger uno de los calificativos, caro lector, para definir la identidad política de Abel Murrieta y asociados sobre su renuncia y regreso al PRI, cuando no fue aceptado por la cúpula panista para convertirse en candidato a la alcaldía cajemense.
Primero, Abel fue sentado, luego se puso de pie con actitud de rebelde y ahora lo vuelven a sentar pero en una mesa con los candidatos al Senado, Sylvana Beltrones y Maloro Acosta.
¿Acaso habrían amenazado a Abel con recordarle su pasado en la tragedia de la guardería ABC?
Quién sabe.
Pero para muchos ya no es el mismo Abel.
Perdió mucho de lo trabajado por años de congruencia y línea recta en la política.
Sobre todo después de sentarse con Sylvana y Maloro, cuando se acaba de tomar y difundir una foto con Toño Astiazarán.
Son misterios que tarde o temprano terminarán por ser del conocimiento público.
A propósito del Maloro, en fin de semana se anunció que renuncia a su cargo de alcalde de Hermosillo, cuando días antes era motivo de comentario que su intención era mantener abierta la puerta por si necesitaba regresar a la presidencia municipal. No renunciaré, dicen que clamaba Maloro a su círculo íntimo.
Con esa actitud derrotista poco puede aportar a mantener una mentalidad ganadora junto con su compañera de fórmula.
Sylvana necesita apoyo no lastres.
¿Qué pasa en ICRESON?
Sí, algo raro se mueve en el Instituto Catastral y Registral del Estado de Sonora. Y que no extrañe si ordenan alguna investigación.
La sospecha es que se están moviendo intereses relacionados con casas abandonadas.
Usted se ha preguntado alguna vez, caro lector, ¿por qué hay tantas casas abandonadas en Hermosillo, que son invadidas temporalmente por gente que necesita de un hogar?
Pues parece que por ahí podría ir la línea de investigación.
El asunto, dicen, es bastante serio. Tanto que llamó la atención del Secretario de Gobierno.
Estaremos pendientes del caso.
Encuestas S.A.
En ciertos círculos se extraña la presencia del analista y encuestador Heriberto Tapia Macías. Dicen las malas lenguas que se maneja con bajo perfil porque su empresa ya está a cargo de la elaboración de toda clase de encuestas y sondeos para estratégicas áreas del gobierno estatal.
El elemento principal de esta contratación sería el nivel de confianza.
Bueno, es año electoral y se deben de tomar las medidas pertinentes.
Y, como siempre, hay versiones de asociaciones y tratos preferenciales porque el enlace es gente cercana al poder.
Nada nuevo.