El general Luis Crescensio Sandoval entiende que la revelación de MCCI sobre su departamento en Huixquilucan adquirido con una maniobra presuntamente irregular tiene su origen al interior del Ejército y que el objetivo es el de desestabilizar sus planes sucesorios en la Sedena hacia 2024.
Legisladores que hoy lunes hablaron con Sandoval deslizan que el general no cree que el ataque de la organización de Claudio X. González provenga de Estados Unidos sino que lo adjudican a oficiales que además buscaron generar un daño en un tema sensible: que el Banco del Ejército le haya avalado al general un crédito hipotecario de más de 9 millones de pesos cuando el grueso de la tropa no puede aspirar ni a recibir medio millon de pesos de esa entidad para adquirir una vivienda.
Este tipo de revelaciones, igual que los viajes del general y sus familiares, contribuyen a la grieta militar, entre una tropa muy castigada en diversos aspectos salariales y de lobres y un grupo de oficiales con un nivel de vida muy alto.
Como sea, el control de daños está en marcha. En primer lugar hoy lunes ningún opositor de alto nivel atacó a Sandoval. Los reclamos vinieron de legisladores periféricos. En segunda instancia, ya se conoce que el general tendrá un encuentro con senadores, algo que por estas horas ajusta Ricardo Monreal. En ese encuentro estaría dispuesto a aclarar dudas sobre su patrimonio.
Para la Sedena es una posición delicada porque allí entienden que vienen nuevas revelaciones del colectivo Guacamaya y que cualquier explicación luego puede quedar desmentida por esas filtraciones.
